Los egipcios se manifiestan en la Plaza Tahrir a un año de su revolución

Miles de egipcios llenaron este miércoles la plaza Tahrir, exactamente un año después del inicio de la revolución que sacó del poder a Hosni Mubarak. Pero algunos dicen que se ha logrado poco.
En ciertos momentos, había tensión en la plaza, en medio de temores por un posible brote de violencia entre los manifestantes y el Ejército.
Muchas personas traían pancartas mientras coreaban frases contra los líderes militares del país; otros celebraban el aniversario y decían que Egipto ha progresado desde la salida de Mubarak.
"Este día hace un año, todas las personas en Egipto estaban esclavizadas por el régimen de Mubarak y los que se atrevían a hablar o escribir sobre su tiranía pagaban un alto precio", dijo Yasmeen Khalil, una maestra. "Sí, la revolución podría no estar completa , pero creo que hay un largo camino por recorrer , y nadie puede negar eso".
La revolución egipcia ocurrió luego de una revuelta en Túnez que llevó a la salida del presidente del país en enero de 2011. Desde entonces, hubo más protestas contra los líderes en el norte de África y el Medio Oriente, incluidos Libia, Yemen y Siria.
Signos de progreso hacia un sistema más democrático en Egipto luego de la revolución contrastan con el sentimiento de que los cambios verdaderos que los manifestantes esperaban no se han realizado.
El Parlamento egipcio, electo democráticamente, se reunió por primera vez este lunes desde la salida de Mubarak. Pero el influyente Ejército, que se encargó del poder luego de que el líder renunció, retuvo mucho de su poder de decisión .
Activistas prodemocráticos, frustrados con lo que dicen es un lento avance en el cambio, se han enfrentado con el Ejército en las calles de Egipto en meses recientes.
“Es irónico que la mayoría de las veces que he sido golpeado, la mayoría de las veces que me he sentido amenazado y en peligro, fue tras la renuncia de Mubarak”, dijo Nour Nour, un activista que tenía 20 años cuando Mubarak cedió el poder. “Y esas son indicaciones muy básicas de que el régimen que está dirigiéndonos en este momento es una mera continuación del régimen de Mubarak”.
En las recientes elecciones parlamentarias, los partidos islámicos, como la Hermandad Musulmana, obtuvieron mejores resultados que los partidos liberales, que representan a algunos de los manifestantes. Una nueva constitución debe de ser escrita.
Algunos egipcios han dicho que las esperanzas forjadas por los manifestantes en los días vertiginosos de enero y febrero del año pasado estaban destinadas a quedarse cortas.
“Había demasiadas expectativas”, dijo Hisham Qasim, un editor de periódicos y activista de derechos humanos. “Elevar las expectativas quizá fue el más grande error, y los medios probablemente en parte tienen que ver con eso”.
Khalil dijo que ella planea pasar la noche en la plaza Tahrir, con sus amigos, con la esperanza de ejercer presión en la junta militar y asegurar la transferencia de poder, el fin de los militares tribunales para civiles, el incremento de los salarios, y la indemnización a las familias de quienes murieron durante la revuelta.
Pero la mayoría, según Khalil, quiere un veredicto de culpable para Mubarak, quien dicen que robó a la nación por décadas y “miró a su gente morir por cientos sin ordenar a los soldados que se detuvieran”.
Mubarak se encuentra bajo juicio acusado de cargos de corrupción y de mandar matar a cientos de manifestantes.
Ben Wedeman contribuyó con este reporte