Dilma Rousseff visita a Fidel Castro; firma acuerdos con Cuba
El líder cubano Fidel Castro se reunió este martes con la presidenta brasileña, Dilma Rousseff, quien realiza una visita oficial a la isla en la que su Gobierno firmó acuerdos de cooperación bilateral que buscan reforzar los vínculos entre las dos naciones, dijeron fuentes diplomáticas.
Rousseff, una exguerrillera de izquierda , llegó este lunes a La Habana en una gira que la llevará este miércoles a Haití. Durante su estancia en la isla se reunió con el presidente cubano Raúl Castro, con quien constató "el excelente estado" de las relaciones bilaterales, según medios locales.
Más temprano este martes, Rousseff dijo a periodistas en La Habana que esperaba reunirse con Castro, el expresidente cubano que se apartó del poder en el 2006, después de que una enfermedad intestinal lo tuvo al borde de la muerte.
"Podemos confirmar que se produjo la reunión entre Dilma y Fidel (Castro)", dijeron fuentes diplomáticas brasileñas, sin aclarar el tiempo del encuentro ni los temas abordados durante la reunión.
Medios locales y fuentes brasileñas dijeron que ambos países firmaron este martes acuerdos de cooperación en una alianza que ambos países catalogaron de "estratégica".
El sitio oficial www.cubadebate.cu mostró imágenes de la firma de acuerdos entre ambos países, sin ofrecer otros detalles.
La cancillería brasileña informó en su sitio que se trata de acuerdos complementarios de cooperación científica, técnica y tecnológica en temas como la metrología industrial, la formación de un banco de datos geológicos, servicios aéreos, entre otros.
Además, Rousseff sostuvo un encuentro con el presidente Raúl Castro, quien reemplazó en el 2008 a su enfermo hermano Fidel.
Ambos líderes recorrieron luego el puerto de Mariel, a unos 45 kilómetros al oeste de La Habana, donde observaron la marcha de la modernización de una terminal de contenedores que se construye con financiamiento de Brasil, calculado en unos 800 millones de dólares, según imágenes mostradas por la televisión local.
La visita de Rousseff se produce en momentos en que el Gobierno comunista implementa más de 300 reformas que buscan sacar a flote el modelo económico de estilo soviético y salvar el sistema socialista instalado hace medio siglo.
"Creo que la gran contribución que podemos dar en Cuba es ayudar a todo el proceso económico", dijo la mandataria brasileña a periodistas.
"Es un tipo de cooperación en la que todo el mundo gana. Gana Brasil por hacer una cooperación (...) con un pueblo y una estructura excepcional, visiblemente competente, capaz en el área de la biotecnología, en el área de las ciencias médicas", dijo.
Los trabajos en el puerto de Mariel son realizados por la empresa brasileña Odebrecht y deben concluir en enero del 2013, con obras que incluyen una "zona especial de desarrollo", con industrias para la exportación y para abastecer el mercado cubano.
Pero Brasilia y La Habana participan de varias iniciativas, como parte de los vínculos que se afianzaron durante el mandato del ex presidente Luiz Inácio Lula da Silva.
Cuba solicitó en noviembre a Brasil, por ejemplo, un crédito de 200 millones de dólares para importar maquinaria agrícola y el gigante brasileño Odebrecht firmaría un contrato con el grupo Azcuba para aumentar la producción de azúcar y la capacidad de molienda en un ingenio del centro-sur de la isla.
Derechos Humanos
La visita de Rousseff a La Habana se produjo poco después de la muerte del disidente Wilman Villar , quien falleció tras una supuesta huelga de hambre, pero la mandataria brasileña ha sido clara con el asunto pese a que algunos esperaban su atención respecto al tema.
Consultada por periodistas, Rousseff dijo que el tema de los derechos humanos no debe ser usado como arma "política" y arremetió contra la cárcel que Estados Unidos tiene en la base naval de Guantánamo, al este de Cuba.
"No es posible hacer de la política de derechos humanos sólo un arma de combate político e ideológico (...) Vamos a comenzar a hablar de derechos humanos en los Estados Unidos y en la base naval de Guantánamo, en todos los lugares", dijo.
Estados Unidos ha sido acusado de privar a los sospechosos de las libertades civiles, manteniéndolos indefinidamente en la base, situada en el este de Cuba, y de enjuiciar a algunos de ellos en tribunales militares en lugar de hacerlo en cortes civiles.
Rousseff también declinó tomar partido en el caso de Yoani Sánchez, una bloguera disidente a la que Brasil otorgó visa pero Cuba ha negado varias veces el permiso de salida, un mecanismo migratorio que regula las entradas y salidas de la isla.
"Brasil concedió la visa a la bloguera. Pero los demás pasos (para el viaje) no son de la competencia del Gobierno brasileño", dijo Rousseff sin ofrecer detalles.
El Gobierno cubano considera a Sánchez y a los demás disidentes como mercenarios al servicio de Estados Unidos. Ha insistido que ella no puede viajar al extranjero, donde tiene un gran seguimiento internacional.