El número de víctimas en una masacre de militares en Yemen se duplica
El número total de víctimas mortales de un sofisticado ataque de extremistas islámicos contra soldados en Yemen aumentó a 177 este martes, dijeron tres funcionarios de seguridad yemeníes a CNN.
Ataques aéreos contra posiciones de militantes han dejado 42 muertos en la provincia de Abyan, informaron funcionarios de seguridad.
En un principio se dio a conocer que habían muerto 90 soldados durante el ataque ocurrido el domingo en una base del Ejército por parte de Ansar al-Sharia, aliada de Al-Qaeda en la Península Arábiga.
“Esto ilustra la completa indiferencia que tienen por la vida humana”, dijo la secretaria de Estado de Estados Unidos, Hillary Clinton, en un comunicado.
También dijo que su país seguirá apoyando al nuevo presidente de Yemen, Abdurabu Hadi .
El ataque fue una derrota para el Ejército yemení en su lucha contra el grupo extremista.
Los militantes se apoderaron de grandes cantidades de armamento, incluido lanzacohetes, morteros, vehículos, tanques, y parecen haber tenido ayuda desde el aparato de seguridad, según los funcionarios.
El baño de sangre ocurrió cerca de Zinjibar, un pueblo en el Mar Arábigo donde Ansar al-Sharia ha estado activo por un año.
Un funcionario yemení, quien declinó ser identificado porque no está autorizado para hablar con la prensa, dijo que los militantes comenzaron a atacar la base desde el este, y luego desde otro lado. La respuesta de las fuerzas “fue demasiado lenta”, dijo, y añadió que en parte fue así debido a las tormentas de aire.
“Las tropas fueron básicamente sacrificadas por los militantes. Los ataques ocurrieron de forma inesperada y ellos estaban más organizados de lo que esperábamos”, dijo un alto funcionario de seguridad.
El lunes ocurrieron más ataques. Militantes vinculados a Al Qaeda ocuparon el presidio de la Guardia Republicana en la provincia de Baitha, según funcionarios del gobierno yemení.
Un jefe policiaco de la sexta comisaría de Adén sobrevivió a un intento de asesinato pero uno de sus guardaespaldas murió. No está claro quién está detrás de los ataques.
Mientras tanto, entrenadores estadounidenses están ayudando al gobierno yemení en sus esfuerzos por volver a controlar al-Kowd, un poblado cercano a Abyan, cerca de donde ocurrió el ataque del domingo, según dos funcionarios de seguridad de Yemen.
Funcionarios estadounidenses no confirmaron de inmediato esta información.
El lunes por la noche y la mañana del martes continuaron los ataques aéreos en un esfuerzo por matar a los militantes; destruyeron sus tanques y vehículos, según funcionarios.
Cientos de tropas fueron desplegadas en Abyan y otros 1000 elementos lo harán durante el martes por la noche, según el Ministro del Interior.
Al menos 146 soldados han sido heridos desde el sábado, según funcionarios de seguridad.
Expertos advierten que al Qaeda está planeando llevar a cabo ataques en seis provincias yemeníes.
Abdul Salam Mohammed, director del Centro Estratégico Abaad, con sede en Sanaa, dijo a CNN que panfletos de Al-Qaeda fueron distribuidos entre residentes para informarles sobre los próxímos ataques.
“Esto es solo el principio, los ataques de Al-Qaeda se esparcirán rápidamente en marzo. Las autoridades de seguridad deben estar en alerta ante otro baño de sangre como el de Abyan”, dijo Mohammed a CNN.
“Las provincias de Sanaa, Baitha, Hadramou, Aden y Shabwa están en la lista de al Qaeda”.