Santorum suspende su campaña y deja el camino libre a Romney
El aspirante a la presidencia de Estados Unidos, Rick Santorum, anunció este martes su retiro de la contienda republicana a la candidatura presidencial, con lo que deja el camino abierto al exgobernador de Massachussetts, Mitt Romney.
En un discurso en Pennsylvania, el estado por el que fue senador y donde inició su campaña presidencial, Santorum justificó su decisión por razones familiares, luego de un fin de semana en que se agravó la salud de su hija.
Bella, la hija de tres años del ahora exaspirante, padece Trisomia 18 , una afección cromosomática serie que interfiere con el desarrollo y del que la mitad de las personas afectadas no sobrevive la primera semana de vida.
“Tomamos la decisión de entrar en esta carrera alrededor en la mesa de la cocina, contra todas las posibilidades”, dijo Santorum. “Hemos tomado una decisión durante el fin de semana (…) la carrera presidencial para nosotros terminó, y suspenderé mi campaña hoy”, dijo.
Antes de confirmar su salida, Santorum agradeció por las oraciones recibidas por la salud de su hija, a quien se refirió como “una luchadora”.
Santorum aseguró que seguirá esforzándose para poner fin al gobierno de Barack Obama.
“Vamos a seguir creciendo y luchando para derrotar al presidente Obama, ganar la Casa (de Representantes) y el Senado y representar los valores que nos hacen el país más maravilloso del mundo”, dijo.
Santorum, un católico de 53 años, era visto como la alternativa de los republicanos conservadores ante el perfil moderado de Romney. A mediados de marzo ganó las elecciones primarias en Mississippi y Alabama .
En la contienda republicana permanecen además el expresidente de la Cámara de Representantes, Newt Gingrich, y el exrepresentante por Texas, Ron Paul, ambos muy por detrás de Mitt Romney en la contienda.
De confirmarse la tendencia en la contienda interna, Mitt Romney será el abanderado republicano que enfrente a Barack Obama en las elecciones presidenciales de noviembre próximo.
Romney y Obama mantienen un enfrentamiento reñido en las preferencias de los votantes para sabe quién está mejor preparado para manejar la afectada economía estadounidense, según una encuesta revelada este martes.
51% de los estadounidenses votaría por Obama si la elección fuera celebrada ahora, en comparación con el 44% que votaría por Romney, según la encuesta elaborada por los diarios Washington Post y ABC News.
Romney tiene una enorme ventaja en dinero y organización en la contienda republicana, ya que sus comités de coordinación política han gastado miles de millones de dólares en anuncios negativos contra sus contendientes en cada una de las principales elecciones primarias disputadas hasta ahora.
El sábado pasado, Newt Gingrich admitió que Romney es el aspirante más probable para la nominación republicana.
“Creo que hay que ser realistas (…) Dado el tamaño de su organización, dado el número de primarias que ha ganado, él es por mucho el más probable nominado republicano”, afirmó Gingrich en entrevista con Fox News.
De acuerdo con la última estimación de CNN, Romney acumula 659 delegados de su partido, frente a 275 de Santorum, 140 de Gingrich y 71 de Paul. Según la democracia indirecta estadounidense, en la que cada candidato va sumando a un número de delegados que representan a la población de cada estado, se necesitan 1,144 delegados para que un aspirante asegure la nominación republicana.
El ganador del proceso será anunciado en la Convención Nacional Republicana, que se celebrará en Tampa, Florida, a fines de agosto.