Jefe de la ONU dice que Siria no ha cumplido plenamente con el plan de paz
Siria no está cumpliendo con su promesa de retirar las tropas y el armamento pesado de las ciudades, señaló este jueves la ONU.
La nación cumple una semana desde que entró en vigor una tregua propuesta por Naciones Unidas.
Aunque la violencia ha disminuido en algunas áreas después del cese al fuego del 12 de abril, activistas dicen que los bastiones de la oposición continúan bajo ataque.
El Observatorio Sirio para los Derechos Humanos señaló que las fuerzas de seguridad se enfrentaron con desertores militares en las ciudades de Deir Ezzor y Daraa, dejando al menos un muerto y tres heridos.
En la provincia de Homs, se escucharon bombardeos y explosiones luego de que aviones militares sobrevolaron la zona para determinar sus objetivos, según el grupo de derechos humanos.
El gobierno no ha cumplido plenamente con la obligación de retirar a las tropas y el armamento pesado de las zonas residenciales, dijo el secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, en una carta dirigida al Consejo de Seguridad de la organización.
CNN obtuvo una copia anticipada de la carta, la cual será distribuida este jueves.
El alto el fuego es parte de un plan de seis puntos propuesto por el enviado internacional, Kofi Annan, que incluye el retiro de tropas y de armamento pesado de los centros poblados, y la autorización del acceso del apoyo humanitario al país.
"La acción respecto a otros aspectos del plan de seis puntos aún es parcial, y aunque es difícil de evaluar, aún no aporta a la clara señal esperada por parte de las autoridades sirias", dijo Ban.
Un equipo de Naciones Unidas se encuentra en el país como parte de una misión de observación; se espera que en los próximos días haya un total de 30 monitores desarmados.
"La colaboración con las partes ya inició y empiezan a informar sobre el cese de la violencia armada en todas sus formas, por todas las partes", dijo Ban.
El funcionario pidió que la misión de observadores de Siria crezca a 300 en 10 lugares del país, un día después de que el régimen dijo que permitiría el ingreso de 250 monitores a la nación.
"La presencia de 250 observadores internacionales es lógica y posible", dijo este miércoles el ministro de Exteriores sirio, Walid Moallem, durante una visita a Beijing.
El país vio una disminución de la violencia después de que el presidente Bachar al Asad se comprometió a cumplir la tregua, pero el régimen sigue atacando bastiones de la oposición, incluidas las ciudades de Homs y Hama, según los activistas antigobierno.
Los informes de violencia y bombardeo contra zonas residenciales han aumentado en los últimos días, mientras que el gobierno culpa de estos ataques a los grupos armados, dijo el jefe de Naciones Unidas.
"El cese de la violencia armada está claramente incompleto", dijo Ban. "Al mismo tiempo, de acuerdo con su aceptación del plan de seis puntos, las partes han reiterado su compromiso con el cese de la violencia armada en todas sus formas".
Los Comités de Coordinación Local de Siria, una red de activistas de la oposición, citaron un ejemplo en el que las fuerzas del gobierno dispararon contra manifestantes este miércoles, mientras observadores de la ONU fueron testigos del hecho en un suburbio de la capital de Damasco.
Sin embargo, Ban dijo que los monitores presenciaron el incidente en Arbeen, donde una multitud de manifestantes opositores "forzó" a los vehículos de Naciones Unidas a una revisión.
"Posteriormente, la multitud se dispersó por el disparo de proyectiles", dijo Ban Ki-moon. "Los responsables de los disparos no se pudieron determinar por parte de los observadores militares de Naciones Unidas".
Los grupos de oposición también reportaron "la intensificación de los arrestos esporádicos" con al menos 39 detenidos desde el alto al fuego, a pesar de una disposición en el plan de paz que pide la liberación de los arrestados durante las protestas.
CNN no puede verificar de manera independiente los reportes de violencia y el número de muertes, pues el gobierno ha restringido el acceso a los medios de comunicación internacionales.
Siria ha estado envuelta en la violencia durante 13 meses, después de que un levantamiento nacional se extendió luego de que el gobierno comenzó a tomar medidas enérgicas contra las protestas pacíficas.
Naciones Unidas estima que al menos 9,000 personas han muerto desde que comenzaron las protestas, mientras que otros ponen la cifra de muertos en más de 11,000.
Estados Unidos y la ONU han condenado la sangrienta represión, en medio de los llamados internacionales para que Bachar al Asad deje su cargo.
Amir Ahmed y Joe Vaccarello contribuyeron con este reporte
