Videos difundidos en internet muestran el horror de la masacre de Qubeir

Entre las víctimas había 40 mujeres y niños. Una vez más, como en la masacre de Houla, las imágenes son escalofriantes. Bebés muertos envueltos en cobijas y velos blancos. Mujeres de rostros lívidos y enrojecidos con los colores de la muerte.

El mundo quedó impactado hace dos semanas a causa de la masacre con al menos 108 muertos en la ciudad siria de Houla. Los activistas aseguran que esto ha vuelto a ocurrir, esta vez en la aldea de Qubeir , cerca de la ciudad de Hama.

Las reacciones a la tragedia ya se conocen. Horror, impacto, y luego la reacción, culpando a Bachar al Asad mientras que el gobierno de éste culpa a los terroristas.

Un video difundido en YouTube capturó a los muertos con una cámara y algunos están tan quemados que quedaron irreconocibles. Una voz dice en la grabación: “Esos son niños de la granja Qubeir. Son los niños de la masacre, igual que en Houla. Miren, árabes. Miren, musulmanes. ¿Acaso ellos eran terroristas? Mira, Kofi Annan".

La red opositora Comités de Coordinación Local de Siria señaló que al menos 78 personas, 35 de las cuales pertenecían a la misma familia, fueron asesinadas por las fuerzas del régimen sirio en Qubeir. Algunos habitantes sospechaban de los Shabiha, grupos armados independientes que trabajan para el gobierno. La aldea estaba habitada por 200 personas; tras el terrible ataque, casi la mitad murió. Los activistas de la oposición dicen que las fuerzas del gobierno sirio bombardearon Qubeir durante una hora antes de que las milicias armadas con rifles AK-47 barrieran la aldea a pie, disparando a quemarropa en contra de los habitantes o atacándolos con cuchillos. El gobierno negó las acusaciones.

Durante la crisis en Siria, al Asad ha culpado a los terroristas de las masacres, como en el caso de Qubeir, sobre la que dijo que la masacre pretendía “ser un medio para presionar a Siria”, según reportaron los medios estatales.

El video fue publicado en YouTube la noche del miércoles. CNN no ha podido verificar su autenticidad. Tampoco lo han hecho los observadores de las Naciones Unidas que intentaron llegar a Qubeir el jueves, pero fueron interceptados por el Ejército y los civiles. Los observadores querían “corroborar los hechos” para que el mundo supiera la verdad en el marco de las negociaciones de la Asamblea General de las Naciones Unidas.

Muchas naciones han culpado a al Asad por la masacre de Houla. ¿Pensarán lo mismo acerca de Qubeir? El secretario general de la ONU, Ban Ki-Moon, calificó la masacre como “perturbadora y enfermiza”. Al dirigirse a la Asamblea General, declaró que los observadores que intentaban llegar a Qubeir habían recibido fuego de armas cortas. El gobierno de al Asad, dijo, ha perdido “toda legitimidad”.

La cámara recorre la escena con movimientos torpes, mostrando los cuerpos. La única forma de conservar los cadáveres con las crecientes temperaturas veraniegas es con botellas de plástico congeladas y grandes trozos de hielo.

Algunas de las víctimas, cerca de 40, fueron enterradas el jueves, según declaró un joven activista cuyo nombre se omite por razones de seguridad. Fueron enterrados en fosas comunes. El activista reveló que los Shabiha llevaron a los cadáveres hacia las aldeas vecinas.

La secretaria de Estado estadounidense, Hillary Clinton, dijo que la masacre de Qubeir era “inadmisible”. Señaló que ha llegado el momento de que el mundo se una para destituir a al Asad.

Hace nueve días, el enviado especial de la ONU, Kofi Annan, instó a al Asad a tomar medidas decisivas y notorias para cambiar su postura militar, para cumplir su compromiso con el plan de paz acordado. Sin embargo, ha sucedido todo lo contrario.

Annan informó a la Asamblea General que se han intensificado los bombardeos en contra de las ciudades sirias y que “las milicias respaldadas por el gobierno parecen hacer lo que quieren con terribles consecuencias". Dijo que al Asad no ha demostrado tener intenciones de cambiar el rumbo; es momento de hacer más, ya que Siria está al borde de una guerra total.

El grupo internacional de derechos humanos, Avaaz, emitió un informe sobre la tregua que está fracasando en Siria:

• Implementación de un proceso de paz completo: fallido. “La oposición no se puede organizar efectivamente en Siria debido, en parte, a la detención, tortura y asesinato de muchos de sus miembros".
  

• Cese al fuego: fallido. “Los choques entre las fuerzas opositoras son constantes; la represión en contra de los manifestantes pacíficos y el bombardeo de las zonas residenciales por parte del régimen siguen sin ser contenidas".
  

• Entrega de la ayuda humanitaria: parcial. “El gobierno controla en gran medida las rutas del Comité Internacional de la Cruz Roja y la Media Luna Roja y ha evitado que la ayuda cruce las fronteras. La ayuda solo ha podido entregarse en cinco puntos que están bajo control del régimen. Aunque Asad dijo ayer que podrían entrar al país otras agencias, aún no está delineada la logística.
  

• Liberación de prisioneros: fallida. “Aunque se liberó a 86 estudiantes de la Universidad de Aleppo en mayo, más de 600 continúan detenidos".
  

• Libre tránsito de los medios: fallido. “Aunque el régimen asegura que se han expedido 400 visas a los medios, los movimientos de los periodistas están seriamente restringidos, haciendo casi imposible reportar libremente. Las personas con quienes hablan a menudo son castigadas.

• Libertad de manifestación: fallida. “Los manifestantes pacíficos son atacados con frecuencia, a veces bombardeados; a esto hay que agregar las continuas redadas en contra de los manifestantes, incluidos niños, que con frecuencia son torturados durante la detención".
  

La cámara recorre los cuerpos achicharrados y se explica que un cadáver ennegrecido es una madre acunando a su hijo. Los sitios de internet en los que se ha publicado han agregado una advertencia sobre el contenido gráfico.

Los expertos en Siria concuerdan que es un nuevo Houla. “Asad y su régimen han masacrado a la gente a gran escala durante varios años; no tenemos razón para creer que se detendrán porque Kofi Annan les pide cortésmente que lo hagan”, afirmó Michael Weiss del centro de estudios británico The Henry Jackson Society. “¿Cuántos baños de sangre como este permitirá Occidente antes de intervenir en defensa de los civiles sirios?”, preguntó. Agregó que el mundo debe darse cuenta de que la masacre de Houla, aunque impactante, no es la única.

Yousuf Basil, Amir Ahmed y Arwa Damon de CNN contribuyeron con este reportaje.