La niña detenida en Arizona viajaba con 15 contrabandistas, dice Arpaio
El alguacil del condado de Maricopa, Joe Arpaio, se refirió este jueves como contrabandistas a las 15 personas detenidas por los agentes a su cargo el pasado viernes, en una operación en la que también fue detenida una niña de seis años.
"La niña de seis años que detuvimos (…) vino (a través) de México de El Salvador a través de mi condado con 15 personas involucradas en contrabando de personas, en tráfico”, dijo Arpaio en entrevista con CNN en Español.
La menor y las otras 15 personas fueron detenidas el pasado viernes por agentes de Arizona , estado al que pertenece Maricopa, cuando viajaban en una camioneta, horas después de que el presidente Barack Obama anunció el alto a la deportación de jóvenes inmigrantes.
"Ellos (los contrabandistas) no dijeron de dónde era (la niña), entonces la entregamos al gobierno federal y estamos tratando de determinar quién es, de dónde es y a dónde iba", añadió.
Arpaio, conocido por sus duras políticas contra la inmigración ilegal, aseguró que una posible deportación y el futuro de la niña no están en sus manos, sino que depende del gobierno federal y de las autoridades del país de origen.
“Ya no está en mis manos, cumplimos con nuestro trabajo", dijo. "Es triste que esto ocurra debido a la inmigración ilegal que enfrentamos”.
Interrogado sobre el DREAM Act y la situación de los jóvenes inmigrantes ilegales en el país, el alguacil dijo sentir compasión.
“Lo único que tengo que decir sobre esto es que siento compasión por esos jóvenes que llegaron de niños a este país, pero por otro lado yo juré cumplir y hacer que se cumplan todas las leyes”, dijo.
Arpaio agregó que su deber es más que sentir compasión. “Hay algo que no funciona con el sistema”, consideró.
En mayo pasado, el gobierno federal presentó una denuncia contra Arpaio por “abuso de poder” en su combate a la inmigración ilegal.
El Departamento de Justicia estadounidense consideró que el alguacil ha incurrido en prácticas discriminatorias que incluyen redadas y la creación de un cuerpo especial en acciones enfocadas contra hispanos.
Arpaio también ha sido señalado por su uso de aviones y gas lacrimógeno contra los inmigrantes.
La última acusación en su contra es por ignorar denuncias de abuso sexual contra menores latinos, algo que él ha descargado en la oficina a su cargo.
Arpaio, y autoproclamado como el sheriff más duro de Estados Unidos, ha sido reelegido en su cargo en cinco ocasiones para periodos de cuatro años y ocupa su cargo desde 1993.