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La sociedad japonesa lidia con el problema del acoso en las escuelas

Dos casos recientes fueron motivo para que el gobierno anunciara un grupo de trabajo para apoyar a las escuelas a combatir el acoso escolar
vie 27 julio 2012 09:57 AM

El incienso se quema en una esquina de la sala de la familia Nakai, como parte de un altar para Yumi, la hija que se suicidó hace siete años. Cuando se quitó la vida, al saltar de un edificio de condominios, Yumi tenía solo 12 años. 

"Nunca vimos esto venir", dice el padre, Shinji. "Ella era la consentida de papá, íbamos a nadar y a esquiar juntos, y amaba viajar. Estaba convencido de que hubo un error".

Su madre, Setsuko, prende otra vela en el altar de su hija y reza por ella, como cada día. Ella está convencida de que el acoso en la escuela fue uno de los principales motivos por los cuales Yumi se suicidó. En los meses antes del incidente, le dijo a su mamá que era molestada por algunos de sus compañeros.

“Llamé a la escuela y hablé con su maestro”, recordó. “El maestro dijo: ‘veré el problema’ y nunca se volvió a comunicar conmigo, entonces asumí que se había resuelto”.

Yumi dio a entender que fue víctima de acoso en la nota que dejó de despedida, donde escribió que decidió quitarse la vida “debido quizá a algunos de mis compañeros, estudios y exámenes”.

Pero sus padres aún viven una batalla legal con la escuela y con el Consejo Educativo de Kitamoto. La familia argumenta que la escuela incurrió en negligencia para prevenir el acoso e investigar su suicidio. Shinji Nakai afirma que la institución solo le mostró una parte de la investigación que realizaron, algo que el consejo escolar niega.

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En un comunicado enviado a CNN, el Consejo informó que “investiga la causa del suicidio, escuchando de parientes, colectando la mayor información posible, incluida la posibilidad de acoso escolar”. La escuela también habló con estudiantes, pero funcionarios escolares no encontraron datos relacionados con la muerte. Una corte falló recientemente a favor de la escuela. Los parientes de Yumi presentaron una apelación en una corte superior este lunes.

Este drama legal ocurre luego de otro caso de acoso escolar que horrorizó a Japón. Un estudiante en Otsu, al oeste de Tokio, se suicidó el año pasado al saltar de un edificio luego de que sus acosadores lo forzaron a ensayar su muerte. 

Los medios japoneses y los familiares del joven afirman que él pidió ayuda al maestro, pero sus súplicas fueron ignoradas. Tras el incidente, el gobierno formó un equipo especial para ayudar a las escuelas y a los consejos escolares a combatir el bullying.

El nuevo grupo de trabajo contra el acoso será responsable de identificar casos serios de bullying escolar en sus primeras etapas, así como de dar asesoría a los consejos escolares y a las escuelas, dijo Hirofumi Hirano, ministro de Educación, Cultura, Deportes, Ciencia y Tecnología, durante una conferencia de prensa este martes.

El ministro de Educación también anunció planes para realizar de emergencia una encuesta para todos los estudiantes de nivel elemental, medio y preparatorio en Japón el próximo mes, en un intento por delinear medidas de prevención apropiadas.

“La gente ha señalado que hay mucha presión académica en los adolescentes en Japón, lo que crea estrés y lleva al acoso escolar en las escuelas; otros hablan de cómo los casos de acoso escolar en Japón pueden ser orientados a grupos”, dijo Sachiko Horiguchi, un antropólogo de la Universidad Temple de Tokio.

Sin embargo, Horiguchi cree que el problema es más complejo y que el acoso escolar no es un problema exclusivo de Japón . Pero un asunto recurrente es “el problema de que la escuela y el Consejo de Educación fallan en aceptar el hecho de que hay algo de acoso”, dice Horiguchi. “Eso puede ser bastante común en muchas escuelas, pero probablemente es cada vez más difícil negar eso”.

Los parientes de Yumi coinciden. Ellos creen que la escuela ha encubierto el caso, y que nadie quiere aceptar que hay un conflicto. “Creo que el problema es el sistema de evaluación en la educación japonesa. Si la escuela admite un incidente de acoso escolar, puede afectar la carrera del profesor”, dijo el padre de la niña, Shinji. “Los integrantes del Consejo Escolar y la escuela son como familiares, se protegen unos a otros. Es una desventaja para ellos abrir la investigación, por eso ocultan la verdad”.

Los familiares de Yumi quieren que se reconozca el acoso a su hija para sentir que finalmente se cierra un capítulo y poder enterrar sus cenizas.

“Solo quiero saber la verdad, ¿por qué tenía que morir?”, dijo Shinji. "A menos de que sepa, no puedo aceptar su muerte”.

Junko Ogura contribuyó con este reporte

 

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