EU anuncia nuevas sanciones contra Irán, y bancos de China e Iraq
El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, anunció el martes nuevas sanciones en contra de la industria petrolera de Irán, y bancos de China e Iraq, advirtiendo a Teherán que enfrenta “consecuencias crecientes” por negarse a responder a los cuestionamientos internacionales sobre su programa nuclear.
Obama dijo que los bancos de China, Kunlun, y el Banco Islámico Elaf, de Iraq, “facilitaron transacciones con un valor de millones de dólares” con bancos iraníes que ya fueron sancionados.
“Al cortar estas instituciones financieras de Estados Unidos, hoy queda claro que vamos a exponer a cualquier institución financiera, sin importar dónde se encuentre, que permita al cada vez más desesperado régimen de Irán mantener acceso al sistema financiero internacional”, aseveró Obama en un comunicado emitido por la Casa Blanca.
“Desde que asumimos el cargo, hemos presentado al gobierno iraní una opción clara: cumplir con las obligaciones internacionales y reintegrarse a la comunidad de las naciones, o enfrentar las consecuencias crecientes”.
Las sanciones anunciadas el martes están destinadas a paralizar las ventas de productos petroquímicos de Irán, y de petróleo crudo. No hubo una respuesta inmediata del gobierno iraní o de las compañías involucradas.
Estados Unidos y otros poderes occidentales sospechan que el anuncio de Irán de desarrollar combustible nuclear encubre un esfuerzo por construir una bomba nuclear.
Irán insiste en que está produciendo uranio enriquecido para fines pacíficos, y alimentar plantas civiles de energía y reactores médicos, y ha rechazado los mandamientos del Consejo de Seguridad de la ONU para detener esos proyectos.
El organismo de control nuclear de la ONU, la Agencia Internacional de Energía Atómica (AIEA), señala que tiene “serias preocupaciones” sobre posibles aplicaciones militares del trabajo nuclear iraní y ha instado a esa nación para que despeje esas inquietudes.
Sin embargo, varias rondas de conversaciones con Irán no han logrado poner fin a la disputa.
En su comunicado del martes, Obama dijo que Washington “permanece comprometido con una solución diplomática, pero la responsabilidad cae en Irán para que cumpla con sus obligaciones internacionales”.
"Si el gobierno iraní continúa su desafío, no debe haber ninguna duda de que Estados Unidos y nuestros socios seguiremos imponiendo consecuencias cada vez mayores", áfirmó.