El régimen despliega artillería pesada en Aleppo, según rebeldes sirios
Un enfrentamiento entre los rebeldes y las fuerzas gubernamentales sirias tuvo lugar cerca de Aleppo este domingo, en medio de la batalla por el control de esta ciudad, la más poblada del país, donde el régimen ya desplegó armamento pesado para expulsar a los combatientes.
Los helicópteros del gobierno atacaron posiciones de los rebeldes, de acuerdo con activistas de la oposición.
"El zumbido de los aviones de guerra no para", dijo Bachir al Hajji, vocero de una brigada del Ejército Libre Sirio en Aleppo. "Pero ya avanzamos a los vecindarios del este y si Dios lo permite, la lucha acabará pronto y ganaremos".
Al Hajji dijo que los enfrentamientos han causado varios daños en diversos puntos cercanos al centro de Aleppo , entre ellos una zona cercana del palacio presidencial. El combatiente dijo que se encuentra en la Ciudad Industrial de Aleppo, a unos 15 kilómetros de la capital comercial, Aleppo.
Los rebeldes informaron que han rodeado el punto más alto de la ciudad, donde las fuerzas del régimen se encuentran apostadas.
Dos grandes columnas de tropas del gobierno van rumbo a la ciudad, de acuerdo con el Ejército Libre Sirio.
Miembros de esta milicia intentan detener el acercamiento de las tropas del gobierno atacándolas en la provincia de Idlib, afirmó Mohamed Said, vocero en Aleppo para la Comisión General de la Revolución de Siria.
Al menos 124 personas murieron este domingo en todo el país, informaron los Comités de Coordinación Local (LCC, por sus siglas en inglés), un grupo de la oposición.
De esas, 59 fallecieron en Damasco y sus suburbios, mientras que otras 25 murieron en Aleppo.
El secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, informó que la situación puede empeorar y describió a Aleppo como “el epicentro de las batalles entre el gobierno sirio y los que desean reemplazarlo”.
Los rebeldes en Aleppo tienen confianza y poseen influencia creciente. Dicen que tienen el poder de partes importantes de la ciudad y trabajan para quitar el control de la metrópoli a las fuerzas del presidente Bachar al Asad.
El régimen reportó la captura y muerte de decenas de ‘terroristas’, término que ocupan para referirse a los combatientes de la oposición, en varios vecindarios de Aleppo.
En tanto, los activistas de la oposición afirman que las fuerzas de al Asad usan bombas de gran alcance, mientras que los rebeldes han lanzado múltiples ataques en varios vecindarios.
Eso incluye la ofensiva de este viernes para apoderarse del edificio de una cadena de televisión y radio estatal en Aleppo. Los rebeldes lucharon por el control de algunas partes de las instalaciones de la estación, antes de que huyeran por la contraofensiva, según los LCC.
La guerra civil en Siria se concentra en Aleppo.
En un mensaje transmitido por la televisora estatal, el presidente al Asad dijo que docenas de “terroristas” habían muerto o resultado heridos en una explosión en un improvisado sitio de almacenaje de municiones en Homs.
Cerca de la capital siria, "terroristas armados" atacaron un autobús que transportaba 48 peregrinos chiítas de Irán, los cuales fueron secuestrados, informaron medios de comunicación iraníes. Los medios de comunicación de Siria también informaron del secuestro, el cual dijeron que está bajo investigación.
No está claro si el secuestro está ligado con el levantamiento contra el gobierno sirio. El gobierno de iraní es aliado del régimen de al Asad, que ha luchado contra el movimiento rebelde dominado por los sunitas.
Irán ha solicitado a Turquía participe en la liberación de los peregrinos, según informó IRNA, la televisora estatal turca.
Aproximadamente 17,000 personas han muerto en el conflicto en Siria desde que inició en marzo del 2011, cuando el gobierno inició su represión contra opositores, aseguró el mes pasado el secretario general de la ONU, Ban Ki-moon. Activistas de la oposición calculan más de 20,000.
La violencia se ha intensificado durante el mes sagrado del Islam, el Ramadán, que comenzó el 21 de julio en Siria y termina este mes, informó la Cruz Roja.
Mientras tanto, el enviado de las naciones Unidas, Bachar al Jaafari, dijo que su familia y él han recibido llamadas de muerte en Estados Unidos, según medios sirios.
Con información de Saad Abedine.
