Estados Unidos triplica su venta de armas a países en desarrollo
Las ventas internacionales de armas de Estados Unidos se triplicaron el año pasado hasta alcanzar un monto de 66,300 millones de dólares, de acuerdo con un reporte del Congreso que hizo referencia a un gran avión de combate y a un helicóptero que compró Arabia Saudita.
Los Datos del Servicio de Investigación del Congreso señalaron un “extraordinario incremento” respecto al 2010, diciendo que la cifra total de Estados Unidos representa casi el 78% de las ventas globales.
A Estados Unidos le siguió Rusia con 4,800 millones de dólares, y después estuvo Francia, con 4,400 millones de dólares, según el reporte Transferencias de armas convencionales a naciones en desarrollo, 2004-2011.
Los datos permiten a los integrantes del Congreso observar “los niveles de transferencia de armas de los principales proveedores hacia las naciones del mundo en desarrollo… donde el potencial para el estallido de conflictos militares es mayor y donde se lleva a cabo la principal proporción de comercio de armas”, según el reporte.
Naciones como Arabia Saudita, los Emiratos Árabes y Omán, continúan realizando grandes compras de armas debido a las continúas amenazas de Irán.
Arabia Saudita fue el principal comprador de armas de Estados Unidos, lo que representa alrededor de la mitad del total vendido en 2011, con 33,400 millones de dólares, según el reporte.
Este país compró cerca de 84 aviones de combate nuevos, modelo F-15, para añadirlos a su flota, así como actualizaciones para otros 70. La compra también incluyó municiones y misiles para los aviones. Arabia Saudita también compró varios helicópteros Apache y Blackhawk.
“Para ciertos países en desarrollo en estas regiones, la fortaleza de sus economías individuales parece ser un factor clave en sus decisiones para seguir adelante con las compras de armas”, según el reporte.
El 2011 fue el octavo año que Estados Unidos encabezó las ventas mundiales de armas. Estados Unidos y Rusia hicieron casi el 70% de las ventas de armas del mundo en desarrollo entre 2008 y 2011.
Mientras que Estados Unidos mostró un crecimiento enorme en las ventas, es probable que el mercado internacional de armas no crezca en absoluto, según el informe.