Hugo Chávez visita la zona de la explosión en la refinería Amuay
El presidente Hugo Chávez llegó a la refinería de petróleo de Amuay, en el noreste de Venezuela, un día después de que una explosión mató al menos a 41 personas.
Ante los reporteros dijo que era demasiado pronto para especular sobre qué habría causado la explosión que dejó más de 80 personas heridas .
“Hubo una fuga. El gas formó una nube que explotó. Tenemos que investigar por qué”, dijo Chávez.
El presidente ha decretado tres días de luto.
Agregó que las autoridades han iniciado una investigación preliminar, sin embargo, hasta ahora no se ha podido acceder al lugar donde se produjo la explosión.
El sábado por la mañana la explosión dañó la infraestructura de refinación y arrasó con las casas cercanas.
Entre los muertos había 18 miembros de la Guardia Nacional y 15 civiles, de acuerdo con el vicepresidente Elías Jaua, informó la estatal VTV. Seis de los cuerpos no se han identificado. El número de víctimas se elevó a 41 el domingo, cuando dos personas murieron en el hospital. Las víctimas tenían quemaduras en el 100% de sus cuerpos, dijo Jesús Valdés, coordinador de salud del hospital Coromoto.
En total 209 casas y 11 negocios fueron dañados, dijo Jaua.
La refinería -una de las más grandes del mundo- es parte del complejo Paraguaná en el estado Falcón.
Venezuela es miembro fundador de la Organización de Países Exportadores de Petróleo y es uno de los exportadores más grandes del mundo.
La nación tiene una capacidad de refinar más de un millón de barriles por día, de acuerdo con la OPEP.
La organización dijo que los ingresos por petróleo de Venezuela representan alrededor del 94% de los ingresos de exportaciones del país, más de la mitad del presupuesto federal y un 30% del Producto Interno Bruto.
Los países de América del Sur envían un gran porcentaje de sus exportaciones a Estados Unidos.
