Dos integrantes de Pussy Riot son trasladadas a prisiones lejos de Moscú
Las dos integrantes del grupo ruso Pussy Riot condenadas a dos años de cárcel por su protesta en la principal catedral de Rusia fueron trasladadas a penitenciarías en la región de los Urales y la república de Mordovia.
"Según nuestros datos, Nadezhda (Tolokonnikova) ya se encuentra en la prisión número 14 de Mordovia. Mientras, disponemos de información de que Maria Aliojina ha sido enviada a la penitenciaría 32 de Perm (Urales)", aseguró este miércoles Violetta Volkova, abogada de las dos jóvenes, a la agencia Interfax.
El penal número 14 donde fue recluida Tolokonnikova está cerca de una pequeña aldea y acoge a reas que cumplen sentencias por primera vez.
Según informaron fuentes penitenciarias de Mordovia, que se encuentra a más de 600 kilómetros al este de Moscú, en esa cárcel, las presas se dedican a confeccionar uniformes de trabajo para condiciones extremas.
La ciudad de Perm, que acoge el penal adonde fue enviada Aliojina, formó parte de la red de campos de trabajo o gulag soviéticos y está a más de 1,400 kilómetros de la capital rusa.
Esa prisión también cuenta con una fábrica de confección, pero ofrece a las internas la posibilidad de aprender a hacer películas de dibujos animados.
El marido de Tolokonnikova, el activista Piotr Verzilov, dijo que las prisiones a las que fueron enviadas las dos mujeres "son las penitenciarías más crueles".
El grupo Voiná, famoso por sus acciones artísticas de protesta contra el Kremlin, dijo que la prisión de Mordovia era "un infierno".
Tanto Tolokonnikova como Aliojina solicitaron cumplir sus penas en la región de Moscú para poder estar más cerca de sus hijos; la primera tiene un niño de cinco años y la segunda una hija de cuatro.
Las prisiones rusas registran hacinamiento y condiciones de vida difíciles, especialmente durante el invierno, debido a las bajas temperaturas.
Habitualmente, los presos se levantan diariamente a las seis de la mañana, realizan ejercicios físicos al aire libre, dedican casi toda la jornada a trabajar y apenas tienen tiempo libre.
Activistas de los derechos humanos denunciaron que las jóvenes fueron enviadas a penitenciarías lejanas para dificultar que sus familiares y los medios de comunicación informen sobre ellas.
Los jueces dijeron que las integrantes de Pussy Riot habrían sido condenadas a siete años, como solicitaba la Fiscalía, si no hubieran tenido hijos.
El pasado 10 de octubre, una de las tres mujeres perseguidas por su plegaria punk contra el presidente Vladimir Putin, Yekaterina Samutsevich, recibió la libertad condicional mientras sus dos compañeras permanecieron sentenciadas.
Tolokonnikova y Aliojina sostienen su inocencia e insisten en que su protesta en la catedral Cristo Salvador de Moscú tenía fines políticos y no estaba dirigida contra los creyentes ortodoxos.
"Madre de Dios, echa a Putin", decía la canción cuyo video difundido en internet criticaba a la Iglesia ortodoxa por pedir el voto para Putin en vísperas de las elecciones presidenciales de marzo.