Rusia estuvo involucrada en la muerte de un exagente de KGB, según abogado
El gobierno británico tiene evidencia que vincula a Rusia con la misteriosa muerte por envenenamiento del exagente de la KGB Alexander Litvinenko cuando trabajaba para los servicios de inteligencia de Gran Bretaña y de España, según un abogado.
La acusación surgió en una audiencia este jueves en Londres, antes de una investigación sobre la muerte del agente en 2006, la cual comenzará en mayo.
En Gran Bretaña se lleva a cabo una investigación cuando una muerte ocurre de forma inexplicable, para establecer los hechos sobre esta.
Litvinenko, crítico del presidente ruso Vladimir Putin, viajó a Gran Bretaña en 2000 luego de convertirse en un informante de la FSB, la agencia que sucedió a la KGB.
El agente murió en un hospital de Londres el 23 de noviembre de 2006 , luego de ser envenenado con polonio-210. En su lecho de muerte, culpó a Putin, una acusación que el Kremlin ha negado.
El consejero de la investigación, Hugh Davies, dijo que la evidencia del gobierno británico establece una presunción de que el Estado ruso estuvo involucrado en la muerte del agente.
Sin embargo, el material confidencial del gobierno no apoya la idea de que el mismo gobierno británico mató al agente, ni sugiere que Boris Berezovsky —otro crítico del Kremlin— la mafia española u otro grupo del crimen organizado estuvieron tras la muerte, según Davies.
Fiscales en Londres quieren que Rusia extradite a Andrei Lugovoi, sospechoso en el asesinato, algo a lo que Rusia se ha negado en varias ocasiones.
El abogado Ben Emmerson, quien representa a la viuda del agente, Marina, dijo en la audiencia que Litvinenko trabajaba para el MI6, el cual le asignó tareas con los servicios de inteligencia de España para investigar las actividades de la mafia rusa en ese país.
Litvinenko estaba en contacto con un gestor del MI6 conocido solo como Martin, con quien se reunía en el centro de Londres, según el abogado.
Los pagos de la inteligencia española y la británica se hacían directamente a la cuenta bancaria que el agente tenía en conjunto con su esposa, según Emmerson.
Ya enfermo en el hospital, Litvinenko llamó a Lugovoi, a quien comentó sobre un viaje que realizarían ambos a España, una llamada que fue atestiguada por su esposa, de acuerdo con el abogado.
Ambos proveerían información de inteligencia a la fiscalía española sobre los vínculos entre la mafia rusa, el Kremlin y Putin, afirmó.
Emmerson también cuestionó si el gobierno británico hizo lo suficiente para proteger al agente de amenazas a su seguridad por su relación con el MI6.
El Comité de Investigación de Rusia confirmó que quiere estar envuelto en el proceso como “parte interesada”, reportó este viernes la agencia rusa RIA-Novosti, algo que la viuda del agente apoya.
Esto permitiría a representantes rusos examinar a los testigos y estudiar la evidencia.
El comité, una agencia federal, también está realizando su propia investigación en Rusia sobre la muerte de Litvinenko.
Rusia no ha realizado comentarios sobre la acusación de que existe evidencia de que el Estado ruso estuvo envuelto en el asesinato.