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Kim Jong Un cumple un año en el poder norcoreano a la sombra de su padre

El líder de Corea del Norte se ha distanciado del estilo de su progenitor aunque la represión y la desnutrición, entre otros, se mantienen
lun 17 diciembre 2012 02:09 PM

Kim Jong Un dio una impresión favorable en el primer aniversario de la muerte de su padre. Corea del Norte dijo que Kim Jong Il murió de un ataque al corazón por exceso de trabajo el 17 de diciembre de 2011.

Cientos de miles de civiles y soldados se reunieron afuera de la Casa del Sol Kumsusan, en Pyongyang, donde yacen los cuerpos de Kim Jong Il y de su padre, Kim Il Sung.

Acompañado por su esposa, Ri Ju Sol, que parecía estar en avanzado estado de gestación, Kim Jong Un se inclinó ante las estatuas gigantes de los antiguos dirigentes en el interior del mausoleo. Afuera, escuchó un discurso conmemorativo pronunciado por Choe Ryong-hae, jefe del brazo político de las fuerzas armadas. Choe elogió los logros de los anteriores líderes antes de decir, “Kim Jong Un es el destino y futuro de Corea del Norte”.

Ha habido muchos cambios en el último año. Kim Jong Un ha pasado de ser el hijo en duelo a un líder triunfante que encabezó este mes el polémico lanzamiento de un cohete.

El líder de veintitantos años, que repentinamente fue empujado a la fama el pasado diciembre, fue considerado por muchos fuera, e incluso dentro Corea del Norte, como alguien mal preparado para las responsabilidades que se avecinaban. Pero los expertos dicen que pronto se hizo evidente que el más joven de los Kim no emularía el estilo de su padre.

“Kim Jong Il fue de perfil más bien bajo durante unos cuantos años después de la muerte de Kim Il Sung, lo cual está en conformidad con las prácticas confucianas más antiguas", dice John Delury profesor asistente en la Universidad Yonsei de Seúl, Corea del Sur. “Esto es, después de todo, un sistema dinástico, aunque Kim Jong Un demostró rápidamente, ya en la primavera, que iba a ser muy público, muy activo”.

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Abril de 2012 trajo consigo una de las fechas más importantes del calendario de Corea del Norte, ya que marcaba el centenario del nacimiento del fundador del país, Kim Il Sung, festividades que habían sido planeadas desde hace años por el difunto Kim Jong Il. Su hijo tomó las riendas y de forma polémica lanzó un cohete en conmemoración.

Siguiendo el ejemplo de su padre, Kim ignoró la condena internacional por lo que él denominó como un intento por poner en órbita un satélite en operación. Washington, Seúl y otros actores de la región vieron el lanzamiento como una manera encubierta de probar tecnología de misiles balísticos.

El cohete fue un fracaso y los medios de comunicación internacionales que habían sido invitados al país para la ocasión hicieron aún más público el asunto. Y haciendo caso omiso de la vergüenza internacional, Kim Jong Un continuó con las celebraciones.

“De hecho actuó bastante bien para lo que se esperaba de él”, dice Delury. “Habló en público, lo cual es algo que su padre no hizo, y proyectó una especie de confianza y vigor; en verdad puso a su favor la juventud y la experiencia”.

El mundo y la población de Corea del Norte escucharon por primera vez la voz del nuevo líder. Incluso resultó algo más sorprendente que Kim reconociera el sufrimiento de su pueblo. Reunido ante cientos de miles de personas dijo, “nuestro Partido está decidido a que nuestra gente no tendrá que apretarse el cinturón, sino disfrutar la riqueza y el honor del socialismo”.

En cuanto a estilos, Kim tiene una imagen muy distinta a la de su padre. Es más agradable y más dispuesto a interactuar con su gente. A menudo se le ve sonreír y carcajear, y su esposa lo ha acompañado en muchos viajes de campo, algo que resultaba inaudito durante el mandato de su padre.

“Ella ha jugado un papel muy sorprendente en la construcción de la imagen de un líder menos estricto, más relajado, más abierto a nivel local”, añade Delury.

Pero a pesar de que, ante las cámaras, aparece un lado más suave, poco ha mejorado para el pueblo de Corea del Norte. Los grupos de ayuda dicen que la desnutrición sigue siendo muy alta en el campo, que aún permanecen los brutales campos de trabajo forzado y grupos de desertores establecidos en Seúl afirman que Kim ha tomado medidas aún más duras contra las personas que tratan de escapar. Dicen que el líder ha amenazado con encarcelar o matar hasta tres generaciones atrás de la familia que se quedó en suelo norcoreano. Esta es una afirmación que CNN no puede confirmar.

Kim ha dejado su huella en las fuerzas armadas, al sustituir a algunos generales leales a su padre por algunos leales a él. “Definitivamente todos se han percatado de que varios de los personajes clave de las fuerzas armadas, cuatro de los que caminaron hace un año con los restos de Kim Jong Il, han desaparecido de la escena o han sido retirados”. Pero sus declaraciones sobre el liderazgo de Corea del Sur o de EU siguen siendo igual de belicosos que como en la era de su padre. Con frecuencia, visita instalaciones y cuarteles militares.

Las especulaciones sobre un descontento interno entre algunos de los reemplazados por Kim Jong Un podrían ser menores desde el exitoso lanzamiento de un cohete la semana pasada, en lo que fue el segundo intento en un año. “Creo que le valió una gran cantidad de puntos patrióticos”, dice Jasper Kim, fundador del Grupo de Investigación Global Asia-Pacífico. “Así que eso básicamente apaciguará a las fuerzas armadas, lo cual le dará más espacio para maniobrar en términos de lograr la modernización, si ese es su plan”.

La utilización de los medios por parte de Kim Jong Un ha sido un cambio drástico respecto a su padre. Ya no son tan inusuales las transmisiones en vivo y los discursos públicos televisados.

Jasper Kim añade, “Kim Jong Un básicamente creció con Google y su padre creció con las cartas y las estampillas postales. Es una nueva era y Kim Jong Un se percata que cuanto más pueda adaptar el discurso a la comunidad internacional, más será en su beneficio en términos de conseguir la seguridad y el dinero y todo lo que él quiere para su país”. 

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