En el 2013 WikiLeaks publicará un millón de documentos con información confidencial de varias naciones, dijo este jueves el fundador del sitio, Julian Assange, desde el balcón de la embajada de Ecuador en Londres, donde le dieron asilo, informó CNN en Español.
El australiano comentó que su trabajo no será amedrentado y que seguirá enfrentándose a los “abusadores”, para dar a conocer datos que enfrenten a grupos de poder.
Assange mencionó que el Pentágono sigue considerando que WikiLeaks es una organización criminal, y que el gobierno de Australia “no defiende el periodismo”, de acuerdo con EFE.
"Hace seis meses entré en este edificio. Se convirtió en mi casa, mi oficina, mi refugio. Gracias al Gobierno de Ecuador y el apoyo de sus habitantes. Estoy seguro en esta embajada y desde aquí es donde puedo hablar de manera segura", expresó.
La embajadora de Ecuador en Gran Bretaña, Ana Albán, indicó en un comunicado que su país “reafirma la solidaridad” a una persona que es perseguida “por pensar y expresarse libremente”.
"A veces es necesario levantarse y enfrentarse a los enemigos de la democracia, que lejos de buscar la unidad y la paz entre los ciudadanos del mundo, buscan la dominación de pequeños grupos de personas", expresó Albán, de acuerdo con la agencia española.
Las autoridades detuvieron a Assange en Londres, el 7 de diciembre del 2010, a petición de la justicia de Suecia, por acusaciones de que había violado a una mujer y agredido sexualmente a otra.
Las tensiones entre Gran Bretaña y Ecuador aumentaron desde agosto pasado, cuando el país latinoamericano
WikiLeaks ha difundido miles de cables diplomáticos de Estados Unidos, que provocaron molestia en gobiernos de varios países, incluyendo a México.
Funcionarios estadounidenses consideran que la publicación de documentos confidenciales sobre las guerras de Iraq y Afganistán representó un riesgo para la seguridad nacional.
El 19 de agosto del 2012, Assange realizó su primera aparición pública en el balcón de la embajada de Ecuador en Londres. En aquella ocasión pidió que Estados Unidos detuviera su “cacería de brujas”.