Alumnos de Sandy Hook regresan a clases por primera vez desde el tiroteo
Por primera vez desde la masacre en la primaria Sandy Hook, Christine Wilford planea hacer algo notable este jueves y que alguna vez fue rutinario, dejar a su hijo en la escuela.
La última vez que su hijo de siete años, Richie, estuvo en clase, fue el 14 de diciembre, cuando un hombre armado entró a la escuela de Newtown , Connecticut, y mató a 20 niños y seis adultos .
Mientras se escuchaban los disparos, la maestra de Richie cerró la puerta y llevó a sus alumnos a una esquina mientras el tirador recorría los pasillos cargando un rifle de asalto AR-15 y disparando.
Cuando parecía que todo había pasado, los niños fueron llevados a una estación de bomberos cercana donde sus padres se reunieron entre lágrimas con sus hijos y se enteraron que había muertos.
Casi un mes después, Wilford dijo que su hijo tiene problemas para dormir y a menudo tiene miedo de sonidos fuertes.
Pero el jueves se reunirá con cientos de estudiantes de Newtown por primera vez desde la tragedia.
“Creemos que es bueno que regrese”, dijo Wilford. “Si lo dejo en cualquier parte, estoy dejando una parte de mi corazón, así que es difícil dejarlo”.
Pero Richie aparentemente no tenía miedo y dice que esperaba ver a sus amigos, según su madre.
El niño no irá al edificio donde solía estar la primaria Sandy Hook, que según la policía aún es parte de la investigación sobre Adam Lanza , el tirador que también mató a su madre antes de abrir fuego en la escuela.
En cambio, Richie y sus compañeros irán a la escuela Chalk Hill, en el barrio cercano de Monroe, donde una bandera verde y blanca colocada en una barda recibe a los niños.
El superintendente de escuelas públicas de Newtown, Janet Robinson, dijo que parte del edificio había sido transformado para parecer una escuela primaria.
“Queremos tener una rutina tan normal como sea posible”, aseguró. “El jueves habrá un horario normal y haremos el tipo de cosas que sabemos que son buenas para los niños”.
La escuela ha sido equipada con alfombras y muebles similares a los de Sandy Hook para ayudar a la transición de los estudiantes. Incluso la mascota de la escuela, una tortuga, fue llevada al nuevo lugar, según Robinson.
Las medidas de seguridad también se han incrementado al incorporar un nuevo sistema de cámaras y candados, de acuerdo con Jim Agostine, superintendente de las escuelas públicas de Monroe.
“Creo que ahora debe ser una de las escuelas más seguras de Estados Unidos”, dijo el encargado de la policía de Monroe, Keith White.