Washington se prepara para la toma de posesión de Obama
El día que Thomas Jefferson prestó juramento como el tercer presidente de Estados Unidos, rechazó los siete caballos y los dos carruajes que estaban listos para llevarlo de la casa en la que se hospedaba a la Cámara de Senadores, en donde prestaría juramento como presidente.
Según la Sociedad Histórica del Capitolio de Estados Unidos, Jefferson decidió caminar, seguido por los congresistas y los curiosos. Sin embargo, la seguridad alrededor de la segunda toma de posesión del presidente Barack Obama será significativamente más rígida.
La policía cerrará decenas de calles en el centro de Washington y las principales vías de acceso a la ciudad. Las reglas de estacionamiento serán más severas de lo usual. Se revisarán las bolsas y será necesario tener un boleto para acercarse a las ceremonias.
Durante el Evento Nacional de Seguridad Especial del fin de semana en el que se llevará a cabo la toma de posesión, el Servicio Secreto dirigirá a una red de agencias que se encargarán de la seguridad, los transportes y el manejo de las multitudes que se espera asistan a ver a Obama prestar juramento el lunes al mediodía.
“Tenemos 42 socios aquí: todas las agencias policiales, todas las entidades de transporte, todos los que tienen una cámara; estamos usando a todos”, dijo Edwin Donovan, vocero del Servicio Secreto.
Las autoridades calculan que más de 1.8 millones de personas asistieron a la toma de posesión de Obama en 2009. Se espera que en esta ocasión la multitud que rodee al evento sea menor. Las Autoridades de Tránsito del Área Metropolitana de Washington se están preparando para atender a cerca de 800,000 personas en los días cercanos a la toma de posesión.
El Servicio Secreto, el Departamento de Policía Metropolitana de Washington, la Policía del Capitolio y la Policía de Parques están cerrando los caminos principales y secundarios que rodean Capitol Hill, en donde se efectuará la ceremonia. Están reforzando la seguridad en el National Mall para que más personas, de pie, solamente, puedan ver la ceremonia. Están patrullando la ruta del desfile, donde los espectadores se reunirán para ver las carrozas, las bandas y al presidente en su viaje de poco más de tres kilómetros a lo largo de la avenida Pennsylvania.
El puente Memorial, que conecta a Virginia con Washington a través del río Potomac, cerca del monumento a Lincoln, solo estará abierto a los peatones.
Para ver las ceremonias de cerca en los alrededores del Capitolio será necesario presentar un boleto, mientras que el National Mall estará abierto al público en general.
En el Capitolio, los espectadores tendrán que estar de pie, el Servicio Secreto no permitirá sillas de jardín, paraguas o letreros, y en la larga lista de artículos prohibidos están los aerosoles, cornetas de aire comprimido, hieleras, cristalería, herramientas de mano, apuntadores láser, gas pimienta, carriolas y termos.
En las áreas más vigiladas están prohibidas las mochilas, las mascotas y las armas. “Esperamos y planeamos que haya una toma de posesión segura, memorable e histórica”, dijo Janet Napolitano, secretaria de Seguridad Nacional.
Los afortunados que consigan un sitio a lo largo de la ruta del desfile pueden esperar que las puertas se abran a las 6:30 (hora local), más de cinco horas antes de que Obama preste juramento. Se espera que las filas para entrar a estos sitios se empiecen a formar desde antes.
El Servicio Meteorológico de Estados Unidos predice que la temperatura mínima para la mañana del lunes será de -3°C y la máxima de 2.7°C. Hay una probabilidad de nevadas ligeras del 30%.
Las autoridades permitirán que los espectadores lleven letreros, con ciertas restricciones, como el tamaño, a lo largo de la ruta del desfile. Como varias calles estarán cerradas, el acceso al centro será en gran medida a través del transporte público. Las autoridades están preparando puntos de revisión en el sitio de la ceremonia y a lo largo de la ruta del desfile y han desplegado una variedad de unidades especiales para manejar cualquier situación que pudiera surgir.
“Tenemos nuestro equipo SWAT, prácticamente todos nuestros equipos especializados estarán disponibles y en espera, incluidos (especialistas en armas), nuestro equipo de buzos, nuestro equipo de inteligencia, que trabaja las 24 horas, nuestros negociadores de rehenes; nuestros agentes especiales técnicos en bombas también estarán disponibles, así que prácticamente todos nuestros equipos especializados estarán disponibles”, dijo Debra Evans Smith, asistente interina del director del FBI.
“Siempre hay rumores y siempre los estudiamos y los evaluamos, pero actualmente no hay amenazas creíbles en contra de estos eventos”, agregó Smith.
Además de la seguridad terrestre, se restringirá el tráfico aéreo y fluvial. La Guardia Costera está cerrando algunas partes del río Potomac a la navegación recreativa y comercial; la Agencia de Aviación Federal está implementando restricciones adicionales a los vuelos en la región.
En la ciudad habrá cerca de 13,500 miembros del Ejército para la toma de posesión. Fungirán como acomodadores en la ceremonia, marcharán en el desfile y apoyarán a las corporaciones policiales.
Según el Servicio Secreto, los primeros cierres a las calles empezarán a las 7 de la mañana del domingo; todas las calles se reabrirán a las 7 del martes, justo a tiempo para que la capital se paralice por circunstancias diferentes: el embotellamiento político.