España cree "inamistosa" la expropiación boliviana de tres aeropuertos
España anunció este lunes que replanteará las relaciones bilaterales con Bolivia, luego de que el país sudamericano expropiara una empresa aeroportuaria de capital español, la tercera expropiación de empresas españolas en menos de un año en ese país.
La advertencia del gobierno de Mariano Rajoy ocurre luego de que Evo Morales anunciara en la ciudad de Cochabamba, la nacionalización de las acciones de la empresa SABSA, a la que acusó de “no realizar inversiones de importancia” en los aeropuertos de maneja, lo que amplió sus utilidades y ganancias.
En un comunicado, el ministerio de Exteriores español calificó la expropiación como un hecho "inamistoso", y afirmó que aunque no cuestiona el derecho de Bolivia de realizar cualquier expropiación, éstas han sido "sin previo aviso y con la ocupación por la fuerza pública de las instalaciones expropiadas", lo que según Madrid no abona al buen clima para las relaciones de ambos países.
Morales ordenó este lunes que el Ejército tomara el control de los aeropuertos internacionales “en resguardo del interés público”, reportó la Agencia Boliviana de Información.
La compañía de capital español, que es filial de las españolas Abertis y Aena, tenía un contrato de servicios que vencía en el año 2022.
En mayo del año pasado Morales anunció la expropiación de Transportadora de Electricidad (TDE) , empresa en la que Red Eléctrica de España (REE), mientras que en diciembre pasado anunció la nacionalización de cuatro empresas eléctricas manejadas por la firma española Iberdrola.
Las privatizaciones de Morales ya habían afectado intereses españoles desde 2006, año en que realizó la estatización de la riqueza hidrocarburífera, que estaba en manos de la española Repsol, la brasileña Petrobras, la argentina PanAmerican y la británica BP.
En tanto, la compañía Abertis —que tiene la mayoría de las acciones de SABSA— en un comunicado negó la falta de inversión, afirmó que se han invertido 12 millones de dólares en los últimos años, y que aunque respeta la decisión del gobierno boliviano, espera una “compensación adecuada”.
Aena, que tiene el 10% de las acciones de SABSA, se negó a realizar comentarios sobre el anuncio.
Según la página de SABSA, los tres aeropuertos internacionales que controla, el de Viru Viru, de Santa Cruz de la Sierra; el de El Alto, de La Paz; y el Jorge Wilstermann, de Cochabamba; operan con normalidad este lunes.
En enero pasado, Morales dijo durante una entrevista con CNN en Español, que permitirá seguir operando a compañías extranjeras en territorio boliviano si éstas trabajan con responsabilidad y conciencia social.
La ola de nacionalizaciones en Bolivia
Desde que tomó protesta, Evo Morales emprendió la nacionalización de empresas que él considera son estratégicas para el desarrollo del país.
En febrero de 2007, nacionalizó una fundidora de metales del grupo suizo Glencore, y en noviembre de ese año estatizó 180,000 hectáreas de tierras del sureste del país que según Morales estaban en manos de latifundistas.
En mayo de 2008, Morales anunció la nacionalización de la Empresa Nacional de Telecomunicaciones, que era manejada por el grupo italiano EuroTelecom. En junio de ese año, estatizó las acciones de la transportadora de gas Transredes, que manejaba la holandesa Shell.
El 2009 inició con la nacionalización de la petrolera Chaco, que era manejada por capital argentino y británico. En mayo de ese año fue nacionalizada la distribuidora de combustible de aviación AirBP, que era manejada por la compañía británica BP.
En mayo de 2010 nacionalizó compañías eléctricas que manejaban la francesa GDF Suez y la británica Rurelec PLC.
En septiembre de 2010, Morales llevó a cabo la expropiación de la Fábrica Nacional de Cemento, que estaba en manos de capital mexicano, a través de la compañía Grupo Cementos Chihuahua.
También en diciembre de ese año, Morales nacionalizó el manejo de pensiones que realizaban las compañías BBVA de España y Grupo Zurich de Suiza.