Los policías sudafricanos acusados de arrastrar a un hombre son detenidos
Autoridades de Sudáfrica arrestaron el viernes a ocho oficiales de policía acusados de arrastrar a un hombre por una calle mientras estaba esposado a la parte trasera de un vehículo. Una multitud persiguió el vehículo mientras el hombre se golpeaba y se retorcía. Más tarde murió.
El incidente fue captado en video, lo que desató el enojo en el país que ha sido testigo de una serie de incidentes recientes que involucran a policías.
La Dirección de Investigaciones Independientes de la Policía arrestó este viernes a los oficiales que participaron en el hecho y que antes habían sido desarmados y suspendidos, de acuerdo con Zweli Mnisi, vocero del Ministerio de Policía.
Pese a que se tomarán acciones contra los involucrados, se llevará a cabo una investigación independiente, añadió.
“Vemos este incidente bajo una luz seria. Queremos medidas severas que puedan enviar un mensaje a otros oficiales en el sentido de que no se tolerarán este tipo de conductas”, dijo el ministro de Seguridad Estatal, Syabonga Cwele.
No estaba claro cuántos oficiales están involucrados con el incidente. El comandante de la estación de policía local también fue suspendido mientras se desarrolla la investigación, de acuerdo con un comunicado del Servicio de Policía de Sudáfrica.
El video fue captado con un teléfono celular en Daveyton, cerca de Johannesburgo, e impactó al mundo por la crueldad que se observa.
En él se ve a un hombre con camisa roja y tenis blancos hablando con los oficiales de policía.
Luego los oficiales lo esposan a la parte trasera de una furgoneta oficial que comienza a avanzar y hace que el hombre arrastre los pies por el camino. Los oficiales y espectadores corren al lado de la misma.
Algunos en la multitud gritan mientras la camioneta avanza lentamente y luego aumenta la velocidad.
El hombre, identificado como un taxista originario de Mozambique, murió el martes en la noche en una celda de la policía pocas horas después del incidente debido a las heridas que tenía en la cabeza, de acuerdo con Amnistía Internacional.
“Este espantoso incidente que involucra el uso excesivo de la fuerza es el más reciente en un patrón creciente y preocupante de conductas brutales de policías en Sudáfrica”, dijo Noel Kututwa, director de Amnistía Internacional en Sudáfrica.
