Maestros de Dakota del Sur podrán portar armas en las escuelas

La medida fue aprobada por el gobierno estatal y entrará en vigor el 1 de julio, mientras en el país se debate el control de las armas
marcha contra las armas washington

Maestros, personal de seguridad y voluntarios en las escuelas de Dakota del Sur podrán portar armas dentro de los centros educativos, según una ley firmada el viernes por el gobernador del estado, Dennis Daugaard.

La ley, que entrará en efecto a partir del 1 de julio, permitirá a las escuelas crear programas “de centinelas escolares”, bajo los cuales los directivos podrán armar a sus empleados “para frenar las amenazas físicas y defender a la escuelas, sus estudiantes, personal y personas en los recintos escolares contra un ataque violento”, señala.

Todos los centinelas escolares deberán completar un programa de entrenamiento, según la ley. Otros estados como Utah permiten a los maestros tener armas dentro de los salones.

En febrero, el presidente de Estados Unidos, Barack Obama dio a conocer 

, que incluye verificar los antecedentes de los compradores de armas y la prohibición de rifles de asalto.

Obama también propuso prohibir los cargadores de más de 10 balas y las balas que pasan el blindaje, como respuesta a un ataque ocurrido en diciembre de 2012 

, en el que murieron 20 niños y seis adultos. El atacante, Adam Lanza, también mató a su madre antes de suicidarse.

Estados Unidos 

, entre ellos el ocurrido en un cine de Aurora, Colorado, la madrugada del 20 de julio de 2012 donde murieron 12 personas y otras 38 resultaron heridas, así como el del 16 de abril de 2007 cuando un estudiante de 23 años asesinó a 32 personas en el Tecnológico de Virginia.

La 

 (NRA, por sus sigla en inglés), grupo que afirma que las medidas propuestas por Obama violan su derecho constitucional a portarlas.

Un vocero de la asociación afirmó en enero que el grupo ha experimentado un aumento “sin precedentes” en nuevas membresías desde que comenzaron a pedirse mayores controles sobre las armas a inicio de año.

Aproximadamente 250,000 personas se unieron a los 4.25 millones de personas que ya formaban parte de la organización, según el vocero Andrew Arulanandam.

“Esto es en respuesta directa a las amenazas y acusaciones” de Obama y otros líderes políticos, dijo.