Guillermo Alejandro, el primer rey holandés en más de 120 años
Guillermo Alejandro se convirtió este martes en el primer rey de Holanda en más de 120 años, luego que su madre, la reina Beatriz abdicara al trono, con lo que puso fin a 33 años como monarca de ese país.
La monarca, de 75 años, entregó el poder en un acto constitucionalmente ordenado en el salón Mozes del Palacio Real de Ámsterdam. La transferencia se hizo oficial cuando se firmó el "instrumento de abdicación", lo que lleva a que ahora se le conozca como la princesa Beatriz.
Las multitudes reunidas frente al palacio miraban en una gran pantalla como la reina firmó el documento. Max Foster de CNN informó que holandeses habían estado de fiesta hasta altas horas de la noche.
El rey Guillermo Alejandro junto con su madre, su esposa y sus tres hijas aparecieron más tarde en el balcón del palacio. Él comenzó su reinado dirigiéndose a la multitud , a quienes dijo que estaba "agradecido por su confianza y apoyo".
En un discurso televisado este lunes por la noche, la ahora princesa Beatriz dijo que sabía que la nueva pareja real tendría la confianza y el amor de la nación.
"Mi hijo mayor ahora se hará cargo de una tarea hermosa que estará llena de mucha responsabilidad", dijo la reina. "Estoy absolutamente convencida de que Guillermo Alejandro se comprometerá con una fiel devoción a ser un buen rey y para hacer lo que a un buen rey se le pide que haga".
Beatriz se retiró de la fiesta nacional conocida como Día de la Reina, una oportunidad para que los holandeses vistan elegantemente y festejen.
Miles de personas portando alas anaranjadas, playeras y sombreros inundaron el centro de la ciudad. Muchos de ellos ondeaban banderas que decían “Dag Beatrix” en un lado y “Hallo Willem-Alexander” por el otro.
Las campanas de las iglesias sonaron en la ciudad mientras la familia aparecía pro el balcón del palacio real.
La investidura del nuevo rey será realizada en una sesión conjunta con el parlamento al final del día, y será el punto culminante de un año de celebraciones que marcan el fin de la ocupación napoleónica en 1813.
La reina anunció su renuncia en enero, cuando dijo que era el momento para una nueva generación que liderara la nación.
"Siempre he considerado como un privilegio extraordinario poder poner una gran parte de mi vida al servicio de nuestro país", dijo Beatriz, que accedió al trono cuando su madre, la reina Juliana abdicó en 1980.
"Hasta hoy, esta hermosa tarea me ha dado muchas satisfacciones. Es inspirador sentirse cerca de la gente, de compadecerse de los agravios y compartir momentos de alegría y de orgullo nacional".
Los medios de comunicación holandeses han especulado que la reina estaba abdicando para pasar más tiempo con su segundo hijo Friso, que resultó herido en una avalancha en una estación de esquí austriaca el año pasado. El príncipe permanece en coma en un hospital de Londres.
Un rey del siglo XXI
El nuevo rey, de 46 años, fue educado en Gales y Holanda, donde obtuvo un título en Historia en la Universidad de Leiden. Sirvió en la Marina Real Holandesa de 1985 a 1987. El Príncipe de Holanda, el título dado a la persona que tomará el lugar en la línea al trono holandés, está interesado en la sustentabilidad y la innovación.
Guillermo Alejandro está casado con Máxima, que nació en Buenos Aires, Argentina. Es licenciada en Ciencias Económicas y ha trabajado para HSBC y el Banco Holandés. La pareja ha estado casada durante 11 años y tiene tres hijas.
La semana pasada, la pareja dio su primera entrevista televisiva conjunta en la que Guillermo estableció la forma en la que pretende gobernar.
"Quiero ser un rey que sea ante todo tradicional, apegado a la tradición de mis predecesores, que es sinónimo de continuidad y también para la estabilidad del país... pero también ser un rey que en el siglo XXI pueda unir y representar a la sociedad en conjunto".
Cuando se le preguntó cómo pensaba hacerlo, Gillermo dijo a la emisora estatal NOS que estará "presente en el apoyo que la gente necesita”.
Una ausencia notable
La ceremonia de este martes no contará con la presencia del padre de la nueva reina, Jorge Zorreguieta, que fue ministro durante la dictadura militar argentina de 1976 a 1983.
Máxima dijo que su familia no asistiría a su toma de posesión como reina debido al controvertido pasado de su padre.
"Este es un caso constitucional, cuando mi marido llegue a ser rey y mi padre no pueda estar allí, es porque hay problemas", dijo a la princesa a la agencia NOS. "Él sigue siendo mi padre, que todavía disfrutamos de nuestros momentos privados".
Stefan Simon y Brian Walker de CNN contribuyeron con este reporte