Barack Obama garantiza el refuerzo de la seguridad fronteriza en EU
El presidente Barack Obama dijo este martes que la propuesta de la reforma inmigratoria garantiza la seguridad fronteriza, una de las exigencias de algunos republicanos para votar a favor.
El mismo día en que el Senado iniciará el análisis del proyecto —en caso de ser aprobado—, el mandatario estadounidense destacó los beneficios económicos que tendría la aprobación de la reforma propuesta por un grupo bipartidista de ocho senadores.
Obama dijo que los inmigrantes ayudaron a “construir el más grande motor económico que el mundo ha conocido”, y agregó que el debate sobre el tema no es un debate abstracto, sino uno sobre personas jóvenes que se sienten estadounidenses pero legalmente no lo son.
¿Por qué detener inmigrantes en EU es un negocio?
Garantizar la seguridad fronteriza es una exigencia de los legisladores republicanos para que se apruebe el proyecto de reforma.
El presidente estadounidense respondió que en cuatro años han sido desplegados el mayor número de efectivos a la fecha y que el cruce de inmigrantes ilegales está en sus niveles más bajos; agregó que se registró el mayor número de deportaciones de criminales en la historia.
Obama, que ganó la reelección el año pasado en parte gracias al apoyo de los votantes latinos, fue presentado en un evento en la Casa Blanca por una mujer nigeriana que llegó a los Estados Unidos a los 14 años, quien obtuvo un diploma de estudios superiores, y representa “el rostro de los indocumentados” , afirmó el mandatario.
El presidente de EU reconoció que los inmigrantes permiten renovar al país con "talento de todos puntos del globo", y dijo que “ningún otro país puede igualar” la historia de esa nación que ha sido definida por la inmigración.
Sobre los 11 millones de indocumentados que actualmente se encuentran en Estados Unidos, Obama reconoció que rompieron la ley, y que no será sencillo que se regularicen.
La reforma ofrece un camino de 13 años a la ciudadanía de los 11 millones de indocumentados que tendrán que pagar multas, impuestos y aprender inglés, dijo Obama. Además, mejorará el sistema inmigratorio, que “aún está roto”, el cual separa a familias.
Aunque Obama dijo que la reforma que será discutida en el Congreso y que podría ser votada en los próximos tres meses “no es perfecta”, dijo que hay un compromiso de todas las partes, y que no todos obtendrán lo que quieren, incluyendo él mismo.
“No hay razón para que el Congreso no tenga esto hecho para el final del verano”, dijo Obama sobre una posible aprobación de una reforma.
Las encuestas muestran que la mayoría de los estadounidenses están a favor de un cambio en la política migratoria, dependiendo de los detalles de la legislación.
Los republicanos han señalado que apoyarán que comience el debate, por lo que una medida de procedimiento que lo permitirá se espera que este martes reciba más de los 60 votos necesarios, aun cuando la aprobación final de la reforma sea incierta.
Obama y los demócratas están ansiosos por cumplir una antigua promesa al electorado latino, lo que le aportaría dividendos para el partido por muchos años.
Si se aprueba, este plan constituiría el primer gran cambio en la política inmigratoria del país desde 1986.
La propuesta que comenzará a ser debatida, fue presentada por los senadores Marco Rubio, Lindsey Graham, John McCain, Jeff Flake, Robert Menéndez, Dick Durbin, Michael Bennet, y Chuck Schumer.