No es tán épico como su homólogo ruso Vladimir Putin posando junto a un tigre, pero el presidente sirio Bachar al Asad está consiguiendo un nuevo efecto propagandístico con su nueva cuenta en Instagram.
Ninguna foto sangrienta de campos de batalla empaña
, quien disputa una brutal guerra civil contra sus opositores.
En su lugar, foto tras foto aparecen él y su esposa siendo atentos y queridos con la población.
Entre las imágenes aparece una de al Asad hablando con una pequeña niña al lado de una cama de hospital. Luego,
Las fotos de ambos los muestran rodeados, agradecidos, abrazados por multitudes entusiastas.
El presidente anunció la semana pasada, a través de un mensaje publicado en su cuenta en Twitter, que añadía Instagram a su grupo de redes sociales. También tiene una página en Facebook y un canal de YouTube.
El presidente, cuyo gobierno es investigado internacionalmente por
“Dios te bendiga”, “te amamos” y “queremos que ganes esta guerra”, son algunos comentarios comunes publicados con las imágenes.
Sin embargo, los comentarios críticos aparentemente aún no han sido borrados por el régimen.
“Esto no es la Siria real”, escribe alguien. “Muestran a la Siria actual, por favor”, indican algunos comentarios.