La ONU denuncia "atrocidades inefables" en Corea del Norte
La ONU presentó este miércoles un reporte preliminar en el que afirma que Corea del Norte solapa graves atrocidades en contra de su población. El gobierno coreano se niega a cooperar con la investigación y rechaza su validez, según el documento.
Una mujer que fue obligada a ahogar a su propio bebé y un interno de un campo de prisioneros tuvo que comer roedores y lagartijas para sobrevivir, son algunas de las experiencias documentadas en la investigación de Naciones Unidas sobre las violaciones a los derechos humanos en Corea del Norte.
De acuerdo con Michael Kirby, presidente de la comisión de investigaciones, los ejemplos de las "atrocidades inefables" que se han reunido hasta la fecha indican abusos tan graves que requieren de la respuesta de la comunidad internacional.
"Lo que hemos visto y escuchado hasta ahora, la especificidad, el detalle, lo perturbador de los testimonios personales, sin duda parece exigir acciones de seguimiento por parte de la comunidad mundial y la responsabilidad de la República Democrática Popular de Corea", dijo Kirby al Consejo de Derechos Humanos de la ONU.
En el reporte preliminar se informa de las labores más recientes de la comisión. El reporte final se presentará ante la Asamblea General de la ONU en marzo.
El presidente de la comisión de investigaciones señaló que los hallazgos se basan en testimonios obtenidos en audiencias públicas que se celebraron en Seúl y Tokio el mes pasado. Para la construcción del reporte ase usaron testimonios de desertores norcoreanos, exfuncionarios del régimen, sobrevivientes de campos de prisioneros políticos, y familiares de ciudadanos japoneses y surcoreanos que fueron secuestrados por agentes del gobierno norcoreano.
"Los testimonios individuales que surgieron en las audiencias públicas son solo ejemplos y no representan casos aislados", dijo Kirby. "Representan los patrones a gran escala que podrían constituir violaciones sistemáticas y flagrantes a los derechos humanos".
Kirby dijo que en la investigación se supo "de personas que se vieron sometidas a tortura y encarcelamiento por no hacer más que ver telenovelas extranjeras o por adoptar una creencia religiosa".
"La comisión escuchó a los sobrevivientes de los campos de prisioneros políticos que sufrieron hambre y atrocidades inefables durante la niñez como producto de la práctica de 'culpabilidad por asociación', por medio de la que se castiga a otras generaciones por las presuntas opiniones o afiliaciones de sus familiares", dijo, en referencia al relato de Shin Dong-hyuk, el famoso desertor norcoreano, cuyas terribles experiencias se documentaron en la biografía Escape del Campo 14 .
Kirby también se refirió al testimonio de los padres de Megumi Yokota, una chica japonesa de 13 años a la que unos agentes norcoreanos secuestraron cuando regresaba de la escuela en 1977. Yokota fue una de los 13 japoneses a los que Corea del Norte secuestró y mantuvo en un complejo norcoreano para entrenar espías. El régimen señaló que ella y otras siete personas están muertas.
La atención internacional sobre Corea del Norte se concentró anteriormente en detener su programa de armas nucleares, pero, en respuesta al incremento de reportes detallados sobre abusos contra los derechos humanos que surgen del aislado país, el Consejo de Derechos Humanos de la ONU determinó en marzo establecer una comisión .
La comisión busca identificar a las instituciones y funcionarios norcoreanos responsables de las violaciones a los derechos humanos, aunque no se determinaron los mecanismos que serían usados. Algunos grupos de defensa de derechos humanos calculan que hay cerca de 200,000 detenidos en una red de campos de prisioneros en Corea del Norte como parte de un sistema que tiene el objetivo de aplastar a la disidencia política.
Kirby señaló que anteriormente surgieron "rayos de esperanza para un cambio" en Corea del Norte, con la adhesión del régimen a una convención internacional que reconoce los derechos de las personas con discapacidad y las medidas para la reapertura del complejo industrial de Kaesong, que opera en colaboración con Corea del Sur. Sin embargo, estas medidas son efímeras.
Corea del Norte rechazó las invitaciones a participar en las investigaciones y catalogó los testimonios como "calumnias" difundidas por "basura humana", de acuerdo con la agencia de noticias oficial.
A pesar de que Corea del Norte no es miembro de la Corte Penal Internacional, este órgano tiene la facultad de investigar los posibles abusos de los Estados no signatarios a petición del Consejo de Seguridad de la ONU.