Abu Anas al Libi, el líder de al Qaeda que escapó a varios operativos
Abu Anas al Libi había estado en todo el mundo (Afganistán, Pakistán, Sudán, Kenya, Gran Bretaña, Irán y otros lugares) haciéndose amigo de los terroristas más importantes, enemigos de Estados Unidos y sus aliados.
Este sábado, su fuga terminó donde comenzó: en su hogar, Libia.
Fuerzas especiales de EU detuvieron al integrante de al Qaeda, quien tiene 49 años, en la capital Trípoli, informaron funcionarios estadounidenses.
Mientras al Libi hacía sus oraciones matutinas, un grupo de 10 hombres enmascarados lo sorprendió, según una fuente cercana a la inteligencia libia. Él intentó llegar a su carro y tomar su arma, pero fue detenido antes, dijo la fuente que citó a la esposa del hombre.
El gobierno de Libia sabía de la misión.
Al Libi había estado viviendo ahí, más o menos de manera pública, desde hacía un año.
¿Su siguiente destino? Las autoridades de EU desde hace mucho lo buscaban para enjuiciarlo ante una corte estadounidense por su rol en los bombardeos de 1998 a las embajadas en Kenya y Tanzania, donde murieron 200 personas y miles resultaron heridas.
El vocero del Pentágono, George Little, dijo este sábado que el sospechoso fue "legalmente detenido por el Ejército de EU, en una locación de seguridad afuera de Libia".
"Su detención es un gran asunto", dijo Nic Robertson, de CNN, quien ha cubierto el tema de al Qaeda desde hace tiempo. "Es un gran jugador dentro de al Qaeda y en una de las áreas clave, en el norte de África. Este es un paso significativo", señaló.
Paradas en Afganistán, Gran Bretaña y más allá
Al Libi estaba en la lista del FBI de "terroristas más buscados" y se ofrecía una recompensa de 5 millones de dólares por información que llevara a su arresto.
Los cargos que se le imputan son "conspiración para matar a ciudadanos estadounidenses, asesinato, destrucción de edificios y propiedades del gobierno de Estados Unidos, y destrucción de los servicios de defensa nacional de Estados Unidos".
Pero es más que eso.
Está acusado de haber desempeñado un papel clave el 7 de agosto 1998, los bombardeos contra las embajadas estadounidenses en Nairobi, Kenya, y Dar es Salaam en Tanzania. Más de 200 personas murieron y otras 5,000 resultaron heridas en el ataque Kenya, 11 murieron en el atentado Tanzania.
Ya en diciembre de 2010, las autoridades libias informaron a un comité de las Naciones Unidas que al Libi estaba viviendo allí e incluso facilitaron una dirección en Trípoli donde supuestamente residía.
Funcionarios estadounidenses querían detener a Al Libi para que lo juzgara un tribunal estadounidense.
Sin embargo, los analistas de contraterrorismo aseguraron a CNN que no se le había detenido antes a causa de la delicada situación de seguridad en la mayor parte de Libia. Allí, los ex jihadistas —especialmente aquellos que alguna vez pertenecieron al Grupo Islámico Libio Fighters— han alcanzado una influencia considerable desde la caída del antiguo líder Moammar Gadhafi.
La operación del sábado se llevó a cabo con el conocimiento del gobierno de Libia, dijo un funcionario de Estados Unidos. El Pentágono indicó que los militares estadounidenses lo mantenían en un "lugar seguro" fuera de Libia.
"Es un gran logro haberlo conseguido", dijo a CNN Nic Robertson, que durante mucho tiempo ha seguido a al Qaeda. "Tiene un papel relevante en al Qaeda (y) que se encuentra en una de las zonas fundamentales, el norte de África".
Más allá de cualquier impacto psicológico en el grupo terrorista, la captura de al Libi podría servir para obtener una gran cantidad de información acerca de los planes y capacidades de al Qaeda. La red terrorista ha mostrado una particular fuerza en los últimos tiempos en África.
"Claramente, se puede disponer de información útil acerca de la fortaleza de al Qaeda y los islamistas en Libia", dijo Robertson. "Es alguien superior dentro de al Qaeda. Era muy respetado".
En al Qaeda desde su fundación
Nacido Nazih Abd al Hamid al Ruqhay, al Libi se unió a Al Qaeda poco después de su fundación como una organización terrorista, reforzando la presencia del grupo en Afganistán y Pakistán.
Cuando el grupo del fallecido líder Osama bin Laden se trasladó a Jartum, Sudán, en 1992, al Libi se fue con él.
En la década de 1990 continuaron trabajando juntos y al Libi llegó a ser conocido como uno de los agentes más capaces de al Qaeda, sobre todo por su experiencia en la vigilancia y computadoras.
Un compañero de al Qaeda declaró en algún momento que al Libi estaba en Nairobi en 1993, supuestamente para revisar posibles objetivos, entre ellos la embajada de Estados Unidos.
Cinco años más tarde, una explosión en la capital de Kenia mató a más de 200 personas e hirió a 5,000. La explosión en Tanzania, casi al mismo tiempo, dejó otros 11 muertos.
Al Libi se unió a la organización jihadista islámica Libia Fighters antes de trasladarse a Qatar y a Gran Bretaña, donde se instaló en Manchester. Fue allí, en 2000, cuando la policía allanó su casa.
Las autoridades luego descubrieron un documento que se conoció como el Manchester Manual: cientos de páginas de orientación sobre la realización de una campaña terrorista para atacar y destruir embajadas.
Pero no encontraron fue a al Libi, que había abandonado el país antes de la redada.
Se cree que tras esto pasó mucho tiempo en Afganistán antes de huir a Irán tras la caída de los talibanes. Fuentes de inteligencia en Occidente creen que permaneció en ese país antes de volver a su casa en Libia.
Tras años en su Libia natal, al Libi está bajo custodia de EU
En septiembre de 2012, CNN fue el primero en reportar que al Libi estaba vivo y se encontraba en Libia. Fuentes de inteligencia occidentales dijeron que existía la preocupación de que al Libi estuviera trabajando para establecer una red de al Qaeda en el país del norte de África.
¿Pero cuánto tiempo llevaba en casa? En diciembre de 2010, antes del estallido de los disturbios que terminaron con la muerte de Moammar Gadhafi, las autoridades libias informaron a un comité de las Naciones Unidas que al Libi había regresado e incluso dieron una dirección.
Y una fuente de inteligencia occidental dijo que al Libi parece llevar en Libia desde la primavera de 2011, cuando la guerra civil estaba en su pleno apogeo.
No está claro desde cuánto tiempo el gobierno de Libia sabía de la presencia de al Libi, o si lo sabían otros gobiernos que se habían acercado a su arresto. El hecho de que no haya tratado de extradición entre Libia y los Estados Unidos complica las cosas.
Pero el hecho de que al Libi esté en manos de Estados Unidos, por supuesto, lo cambia todo. Además de ser sometido a juicio, al Libi será interrogado sobre lo que sabe de al Qaeda y otras organizaciones terroristas.
Y si habla, podría ofrecer información valiosa sobre los hombres con que trabajó en el interior de Libia y de al Qaeda en general.