El espionaje entre aliados, costumbre en las relaciones internacionales
Para los que estudian o incluso han practicado el espionaje, el hecho de que Estados Unidos espíe a sus aliados no es nuevo. Las naciones amigas se espían unas a otras. Y la realidad es que un amigo hoy puede no serlo mañana, dicen los expertos.
“Incluso entre amigos se da bastante el espionaje y en gran parte está dirigido contra las amenazas a la seguridad nacional”, dijo Charles Kupchan, profesor de Relaciones Internacionales en la Universidad de Georgetown y miembro del Council of Foreign Relations.
“Además, existe una recopilación de inteligencia cotidiana más mundana que sería relevante para el gobierno estadounidense: ¿Quién será el próximo ministro de Relaciones Exteriores? ¿Cuál es la postura de Alemania con respecto a las negociaciones con Irán?”, dijo Kupchan. “El espionaje mutuo. Es “algo que saben" los que lo practican y entre los académicos, y se da a conocer años después mediante una revelación”, dijo Kupchan. “Se ha practicado durante siglos” dijo.
Las embajadas pueden ser operarios de dicho espionaje. Los países permiten que las misiones intercambien información de manera formal, aunque también están acostumbradas a recopilar información en secreto, dijo Peter Earnest, que trabajó para la CIA durante 36 años, incluyendo 25 en el servicio clandestino de la agencia.
“Creo que hay un grado de hipocresía entre los europeos cuando dicen ‘¡Oh, Dios, los estadounidenses nos espían! Bueno, pues ellos también lo hacen”, dijo Earnest, director ejecutivo fundador del Museo Internacional del Espionaje en Washington.
El exespía se refería al alboroto que se ha generado a lo largo de Europa después de la publicación de noticias sobre el hecho de que la Agencia de Seguridad Nacional (NSA, por sus siglas en inglés) de Estados Unidos espió el celular de la canciller alemana, Angela Merkel; millones de llamadas telefónicas en Francia y millones de llamadas telefónicas españolas, así como a sus políticos y funcionarios.
La NSA también escuchó conversaciones del gobierno de México e intervino la cuenta de correo electrónico del expresidente Felipe Calderón y el dominio de correo electrónico de su presidencia, utilizado también por los miembros de su gabinete, de acuerdo con la revista de noticias alemana Der Spiegel.
La mayoría de las notas periodísticas se basan en documentos proporcionados por el excontratista de la NSA Edward Snowden.
El reflector sobre la NSA
Al describir el espionaje entre amigos, Earnest se refirió a una famosa cita del estadista británico del siglo XIX Henry Temple o Lord Palmerston, quien dijo en el Parlamento: “No tenemos aliados eternos y no tenemos enemigos perpetuos. Nuestros intereses son eternos y perpetuos, y es nuestro deber velar por esos intereses”.
El martes ante el Congreso, el director de Inteligencia Nacional, James Clapper, admitió como “un supuesto fundamental” el hecho de que Estados Unidos recopila inteligencia de los líderes extranjeros. Cuando el líder del Comité de Inteligencia de la Cámara, Mike Rogers, le preguntó si los aliados de Estados Unidos espían a los líderes de EU, Clapper respondió “Por supuesto”.
Horrorizados por lo que saben
Durante la Guerra Fría, dos empleados de la NSA, William Martin y Bernon Mitchell, desertaron de la Unión Soviética y revelaron públicamente que Estados Unidos estaba espiando no solo a sus rivales, sino también a sus aliados.
Los empleados de la NSA eran iguales a Snowden por el hecho de que estaban consternados al saber de dicho espionaje, dijo Barrett. Ahora Snowden reside en Rusia donde tiene asilo político.
En el tema de las economías nacionales, los expertos coinciden en que las agencias de inteligencia también examinan el comercio y la industria de los aliados.
“Si los franceses estuvieran recopilando información en Estados Unidos, no implicaría que estuvieran esperando una invasión estadounidense en Normandía. Es para recopilar información sobre la política de Estados Unidos y tal vez hacer un poco de espionaje industrial”, dijo Kupchan. “Hacer este tipo de cosas es la norma para las agencias de inteligencia. Por eso existen. Es su razón de ser”.
Un analista estadounidense mandó un mensaje muy franco a los aliados en Europa y en otros sitios.
“Tengo un consejo para los aliados de Estados Unidos que están indignados por el supuesto espionaje de la NSA a sus líderes: ya crezcan. Me refiero a ti, Alemania. Tú también, Francia. A Brasil y México, también. Igualmente a la UE y a la ONU”, publicó en el blog Commentary Max Boot, refiriéndose en las últimas dos instancias a la Unión Europea y a las Naciones Unidas. “¿La NSA espía a sus líderes? Probablemente. ¿Ustedes espían a los líderes de naciones aliadas incluyendo a Estados Unidos? Probablemente. Solo que ustedes no tienen los recursos o la habilidad para espiar de manera tan efectiva como lo hace la NSA. Aunque si la tuvieran, lo harían”.
‘Creo que parece inapropiado’
Algunos senadores republicanos consideran que el espionaje actual de Estados Unidos a sus aliados es incorrecto. “Desde mi punto de vista, el espionaje a nuestros aliados no parece ser una buena idea, al menos parece que no permite que la diplomacia progrese, en particular el espionaje de la canciller de Alemania durante 10 años”, dijo el senador Rand Paul, de Kentucky, miembro del Comité de Relaciones Exteriores del Senado.
Se espera que el Congreso y la Casa Blanca modifiquen la manera en que se recopila información, se establezca un nuevo código de conducta al espiar a los aliados y se imponga mayor transparencia y supervisión a la NSA.
Se espera también que algunos aliados europeos clave sean parte de la conversación sobre el nuevo código de conducta y, por separado, la Unión Europea podría reforzar sus propias leyes sobre la privacidad, restringiendo la facilidad para compartir cierto tipo de información con Estados Unidos, apuntan los analistas.