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Dos periodistas españoles son secuestrados en Siria, según diario

Un reportero y un fotógrafo desaparecieron hace tres meses cuando se disponían a dejar el país después de hacer una cobertura de dos semanas
mar 10 diciembre 2013 11:00 AM

Dos periodistas españoles con experiencia en la cobertura de guerras fueron secuestrados en Siria por un grupo vinculado a al Qaeda, reportó el diario El Mundo el lunes.

El corresponsal de El Mundo, Javier Espinosa, y el fotógrafo independiente, Ricardo García Vilanova, fueron secuestrados el 16 de septiembre, dijo a CNN la editora de la sección Internacional, Ana Alonso. García Vilanova viajaba con Espinosa pero no estaba trabajando para el diario español. 

Tras tres meses de tratar de conseguir su libertad de forma discreta, el editor de El Mundo, Pedro J. Ramírez, y la familia del periodista decidieron hacer público el secuestro este 10 de diciembre, fecha que las Naciones Unidas designan como el Día de los Derechos Humanos.

"Su captura es una violación flagrante a los derechos humanos (...) y contra todos los ciudadanos que tienen el derecho a recibir información e imágenes", dijo Ramírez este martes en conferencia de prensa en Madrid. 

Espinosa, de 49 años, y García, de 42, han viajado en numerosas ocasiones a Siria, a veces juntos, tal como organizaron este último viaje, agregó Alonso. 

Espinosa ya había sido secuestrado cuando cubría el conflicto en Sierra Leona, mientras que García fue secuestrado 12 días en el 2012, de acuerdo con Gervasio Sánchez, un fotógrafo veterano que conoce a ambos. Los dos fueron liberados posteriormente. 

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El Mundo y las familias de ambos periodistas supieron hace un mes a través de intermediarios que los dos hombres estaban vivos y que habían sido tratados relativamente bien en la misma provincia donde ocurrió el secuestro. Ramírez dice que El Mundo cree que siguen vivos aunque no está claro si siguen en el mismo lugar.

El diario reportó que ambos fueron secuestrados en un punto de revisión de Tal Abyad, en la provincia de Raqqa, cerca de la frontera con Turquía, cuando se disponían a abandonar Siria tras dos semanas de  cobertura del conflicto .

Sus captores forman parte de un grupo vinculado a Al Qaeda y no han dado a conocer qué quieren a cambio de los periodistas.

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