En 2013 murieron menos periodistas mientras ejercían su profesión
En el 2013, a nivel internacional se registraron menos muertes de periodistas en ejercicio de su profesión que el año anterior, una tendencia que también se registró en México, que dejó de estar presente en la lista de países con periodistas fallecidos este año, afirmó este lunes el Comité de Protección de Periodistas (CPJ, por sus siglas en inglés).
En 2013, un total de 70 periodistas murieron en cumplimiento de su labor informativa, un descenso en comparación con los 74 registrados en 2012, según las conclusiones del análisis anual del CPJ, que investiga las muertes de otros 25 periodistas en este año con el fin de determinar si tuvieron relación con la labor periodística que realizaban.
Este año, Siria fue el país donde se registraron más muertes de periodistas en el ejercicio de la profesión, con un total de 28, mientras que Iraq y Egipto registraron un brusco aumento en la cifra de periodistas caídos, según la organización no gubernamental con sede en Nueva York.
Mientras que en 2012 en Iraq no se registraron muertes de comunicadores, este año cierra con el fallecimiento de 10; en Egipto murieron seis, a diferencia del año pasado cuando se registró solo la muerte de uno.
El análisis encontró que Pakistán, Somalia, India, Brasil, Filipinas, Mali y Rusia también registraron varios casos de periodistas muertos por su labor durante el año, aunque en Pakistán y Somalia los casos disminuyeron significativamente.
Destaca la ausencia de México, donde no se confirmaron casos de periodistas muertos mientras ejercían su profesión.
Según la organización, el 36% de los periodistas cayeron en combate o en incidentes de fuego cruzado, mientras que el 20% murieron mientras realizaban otro tipo de cobertura de alto riesgo.
En Latinoamérica, Brasil se convirtió en uno de los países latinoamericanos más peligrosos para los periodistas, luego de la muerte de tres en 2013 debido a su profesión. Los tres fueron asesinados tras denunciar delincuencia y corrupción a nivel local.
El año pasado la organización confirmó que dos periodistas murieron en México debido al ejercicio de su profesión, e informó que investigaba otros cuatro casos.
Dichas cifras contrastan con la del presente año, en el cual no se ha confirmado que existieron asesinatos de periodistas por su trabajo, mientras que aún se investigan al menos tres muertes.
El CPJ también indaga si las muertes de Alberto López Bello, del Imparcial y Radiorama en Oaxaca; Daniel Alejandro Martínez Balzaldúa, del diario Vanguardia de Saltillo y Jaime Guadalupe González Domínguez de Ojinaga Noticias en Ojinaga, están relacionadas con su profesión.
En México "es difícil determinar el motivo en los casos de asesinatos de periodistas”, afirmó el CPJ.
El CPJ, que comenzó a recopilar datos sobre todas las muertes de periodistas desde 1992, considera que un caso está vinculado al ejercicio de la profesión únicamente cuando su personal tiene certeza razonable de que un periodista fue muerto en represalia directa por su labor, en un fuego cruzado relacionado con el combate, o cuando realiza una cobertura en un entorno hostil.