El Evangelio no debe enseñarse a 'bastonazos', dice el Papa a sacerdotes

El papa Francisco se reunió con sus compañeros jesuitas a quienes pidió mostrar dulzura, fraternidad y amor a los fieles del mundo

El papa Francisco pidió este viernes a sus compañeros jesuitas no anunciar el Evangelio católico "a bastonazos inquisitorios", sino hacerlo con "dulzura, fraternidad y amor" alrededor del mundo.

El pontífice hizo el llamado durante una misa en la iglesia del Jesús de Roma con motivo de la próxima canonización del beato francés Pedro Fabro (1506-1546), uno de los primeros compañeros de Ignacio de Loyola, fundador de la Compañía de Jesús, y a quien el Papa considera un modelo de vida.

"Solo si se está centrado en Dios es posible ir a las periferias del mundo", dijo Francisco durante su homilía y les pidió evitar ser "hombres en tensión, contradictorios e incoherentes".

El papa puso como ejemplo el hecho de que Pedro Fabro sintiera "el deseo de dejar en el centro de su corazón a Jesús", lo que "significa pensar como él, amar como él, ver como él, caminar como él".

A su llegada a la iglesia romana, Francisco fue recibido por el superior general de la Compañía de Jesús, el español Adolfo Nicolás.

El papa Francisco ha hablado durante su pontificado

para lo que ya ha tomado una serie de pasos. Instaló un comité de expertos para recomendar reformas a las estructuras económicas y administrativas de la Santa Sede.

Y también ordenó más escrutinio del banco Vaticano, que ha estado plagado de escándalos financieros por años.

En su mensaje de Navidad a sacerdotes, Francisco l

, diciendo; “Los chismes son dañinos para la gente, nuestro trabajo y nuestro alrededor”.

“También significa apostolado, discrecionalidad y servicio pastoral fiel, celosamente llevado en el contacto directo con la gente de Dios. Para los sacerdotes, esto es indispensable”, aseguró.