La gente en Homs clama por la ayuda humanitaria varada afuera de su ciudad
Un convoy de Naciones Unidas que transporta comida para los habitantes de la ciudad de Homs, Siria, espera un permiso de paso mientras los residentes piden al gobierno el fin de un asedio que los ha sumido en el hambre durante casi 600 días.
"Nuestros camiones están cargados y listos para ingresar tan pronto todos los lados lo permitan", dijo Dina Elkassaby, del Programa Mundial de Alimentos de Naciones Unidas (WFP, por sus siglas en inglés).
Las personas atrapadas en Homs tienen poca comida y no han visto un pan en meses. También viven bajo la constante amenaza de los bombardeos.
"La ayuda solo llega afuera. Necesita entrar. Necesitamos comida y agua porque tenemos niños pequeños", dijo una madre a un activista de la oposición en una entrevista obtenida por CNN. La mujer se sienta en la austera sala de su casa con su niño y su esposo a su lado.
Los diplomáticos en las negociaciones de paz Ginebra II, que se realiza en Suiza, alcanzaron un acuerdo para evacuar a algunas mujeres y niños , dijo el mediador de la ONU, Lakhdar Brahimi.
Pero para esta familia en Homs, salir no es una opción.
“Mi esposa se va y mi bebé se va, ¿y yo debo quedarme aquí? ¿Qué haré si me quedo aquí? El gobierno piensa que somos terroristas. Eso no funcionará”, dijo el esposo en la entrevista.
Naciones Unidas estima que necesitará alimentar a unas 2,500 personas si el convoy recibe permiso para entrar a Homs.
“WFP ha preparado 500 raciones familiares ahora. Cada ración tiene suficiente para cinco personas”, dijo Elkassaby.
Estados Unidos culpa al gobierno sirio para la dura situación, acusándolo de implementar una “campaña de arrodíllense o mueran de hambre”.
“El régimen bloquea todos los convoyes de ayuda a Homs y lo ha estado haciendo durante meses. La situación es extremadamente urgente. Cualquier cosa que el régimen diga al contrario está mal”, dijo un alto funcionario en las pláticas de paz a CNN.
Este miércoles, las pláticas de paz en Siria no consiguieron nada "sustancial", dijo Brahimi en Ginebra, pero él permanece esperanzado en que ambos lados reinicien negociaciones más productivas.
En tanto, aviones del régimen sirio bombardearon Daraya, al sur de Damasco. Arrojaron 20 barriles bomba, según grupos de la oposición.
Al menos 114 personas fueron asesinadas este miércoles en Siria, incluidos 21 niños, indicaron los Comités de Coordinación Local de Siria, una red de activistas de oposición.
Según Naciones Unidas, más de 100,000 personas han sido asesinadas en el país desde 2011.