Los países se unen para terminar con las amenazas en los Juegos de Sochi
Las autoridades de Estados Unidos trabajan con Rusia y otros países para terminar con las posibles amenazas de seguridad relacionadas con los Juegos Olímpicos de Sochi, además de las preocupaciones por las pastas de dientes y cosméticos con explosivos, dijo una fuente de inteligencia de Estados Unidos.
El oficial dijo que las amenazas varían en credibilidad.
La mayor fuente de esas amenazas es el grupo Imarat Kavkaz en Rusia, que ha dicho públicamente que intentará interrumpir los juegos, dijo el oficial este jueves.
La preocupación de que los tubos de pasta o cosméticos puedan esconder explosivos se originó del líder de los “rebeldes extremistas”, dijo el Comité de Seguridad Nacional de Estados Unidos, Michael McCaul.
Estas preocupaciones causaron que oficiales franceses arrestaran a dos mujeres chechenas esta semana, dijo la fuente de inteligencia de Estados Unidos.
Eric Pelletier, el corresponsal del periódico francés L'Express dijo que la inteligencia francesa empezó a buscar conexiones entre las mujeres con grupos de terrorismo en diciembre después de que el servicio exterior de inteligencia advirtiera de la amenaza de una "viuda".
Una de las mujeres detenidas es la viuda del yijadista checheno Khamzat Chemilev, quien fue asesinado al enfrentarse a fuerzas de seguridad rusas en agosto de 2010, y la otra mujer es su hermana, según dijeron las fuentes a Pelletier.
Al mismo tiempo, Rusia envió comunicados similares a otros países europeos sobre preocupaciones de que chechenos y otros grupos planearan regresar a Rusia para llevar a cabo un ataque.
Pelletier dijo que las fuentes indicaron que la información provenía de la inteligencia Rusa.
La viuda de Chemilev fue puesta en libertad y su hermana se presentará frente a los fiscales en París el viernes. Los investigadores están interesados en los contenidos de su computadora y es probable que se lleve a cabo una investigación judicial formal, según Pelletier.
Arrestos de extremistas chechenos también fueron reportados en Austria, pero según Helmar Dumbs, un reportero de seguridad nacional de Austria, el ministro del Interior negó una conexión entre ellos y los tubos de pasta y explosivos.
