El Salvador iniciará este martes revisión manual de las actas electorales
Los resultados de la segunda vuelta para elegir a presidente de El Salvador, celebrada el domingo, aún no dan a un claro ganador.
El candidato oficialista del Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMLN) a la presidencia de El Salvador, Salvador Sánchez Cerén, confiaba el lunes en que el Tribunal Supremo Electoral confirme su triunfo en las elecciones del domingo, mientras el opositor derechista Norman Quijano pidió conteo manual de votos para reconocer el resultado.
Sánchez Cerén superó con 50.11% (1,494,144 votos) a Quijano, que obtuvo el 49.89% (1,487,510), según el escrutinio preliminar del 100% de las mesas.
Ante la diferencia de sólo 6,634 votos, el Tribunal Supremo Electoral (TSE) decidió no proclamar ganador e instaló este lunes las mesas para iniciar el martes la revisión manual de las actas electorales, que espera tener listo el miércoles o más tardar el viernes.
"Estamos ante un evento electoral en donde absolutamente todos los datos son verificables y eso nos asegura una elección creíble, transparente, segura, legítima y legal", aseguró el presidente del TSE, Eugenio Chicas.
Sánchez Cerén declaró el lunes, "Estamos felices y alegres, comprometidos con el país porque no tenemos ninguna duda de que se van a reafirmar los resultados del conteo preliminar".
Por su parte Quijano, de la opositora Alianza Republicana Nacionalista (Arena, derecha), a través de su cuenta oficial de Twitter, pidió el "conteo voto por voto" de los resultados. "En nuestro conteo yo salgo como presidente electo".
La noche del lunes, Quijano se comprometió a respetar los resultados con el nuevo conteo que abra todas las urnas.
El gobierno de Estados Unidos pidió en un comunicado a ambas fuerzas políticas ajustarse a las leyes electorales para lograr "una conclusión pacífica" del proceso.
En el mismo sentido se pronunció la misión de observadores de la Organización de Estados Americanos (OEA), que además resaltó la tranquilidad y el espíritu cívico que imperó en la votación.
De ser proclamado ganador, Sánchez Cerén sería el primer exguerrillero en asumir la Presidencia de El Salvador, y el cuarto en América Latina, después del nicaragüense Daniel Ortega, el uruguayo José Mujica y la brasileña Dilma Rousseff.
En la primera vuelta de las elecciones presidenciales de El Salvador, celebrada el pasado 2 de febrero, Sánchez Cerén logró el 48.96% y Norman Quijano, el 38.96%, según datos del Tribunal Supremo Electoral (TSE).
Tanto Quijano como Sánchez dijeron tener el mejor plan de gobierno para reducir los índices de criminalidad y mejorar el desarrollo económico, dos de los principales temas que, según sondeos, preocupan en mayor medida a la población.