El primer año de Francisco: el 'papa bueno' sin grandes cambios
En su primer año de pontificado, Francisco ha renovado el discurso de la Iglesia, adoptado una imagen de papa bueno y ganado gran popularidad, pero no ha definido la línea en la que estarán enfocadas sus políticas o realizado cambios significativos, coinciden analistas consultados por CNNMéxico.
“El problema es que si no define en tiempo razonablemente corto para dónde enfila, para dónde orienta a la Iglesia católica, todas estas expectativas se le van a revertir en contra, porque la gente pensará que fue engañada”, consideró en entrevista Elio Masferrer Kan, profesor investigador de la Escuela Nacional de Antropología e Historia.
Francisco fue nombrado Persona del año por la revista Time, nominado al premio Nobel de la paz y sus apariciones en la prensa son frecuentes por abrazar a los enfermos, preferir la austeridad a los lujos.
Además, logró lo que su antecesor no: atrajo al Vaticano tres veces más fieles que Benedicto XVI, según cifras de la Santa Sede.
Inició una reorganización en la administración de las finanzas de la Iglesia. Sin embargo, en el tema de abusos sexuales por parte de sacerdotes, sus acciones han sido insuficientes, según los analistas.
“Es un balance ambivalente: trabaja para resolver las cuestiones financieras, resolvió los elementos de equilibrio en la Iglesia católica, pero en el tema de la pederastia juega a borrón y cuenta nueva cuando los pederastas son delincuentes que van a seguir haciendo sus cosas. No es sacando decretos como se para a esa gente, es un problema de justicia”, dijo Masferrer Kan.
El papa bueno
Francisco goza de una gran popularidad y esto, según Masferrer, se debe en parte a sus declaraciones sobre parejas del mismo sexo, el papel de la mujer en la Iglesia, referencias al divorcio, o el actuar de los sacerdotes.
“Hay muchos católicos que se sienten católicos y que quieren que la Iglesia católica cambie. Bergoglio ha construido un discurso que le sugiere a esos católicos, que quieren seguir siéndolo y que están a favor de los cambios en la Iglesia, que sí va a haber novedades interesantes, por un lado. Pero por otro lado, tiene una presión muy fuerte de los grupos de ultraconservadores que no quieren que cambie nada. Entonces Bergoglio guiña a los renovadores, a los conservadores, pero no ha cambiado nada: la cuestión del casamiento en los divorciados, la mujer en la Iglesia católica; nada", dice.
Para José Barba, exlegionario y profesor de Instituciones Políticas y Sociales en el Instituto Tecnológico Autónomo de México (ITAM), estas acciones obedecen a una estrategia “publirrelacionista“, con cambios de forma, pero no de fondo.
“Cuando llega el nuevo papa se da cuenta que no está relacionado con los modos de operar de la curia romana y toma la estrategia del papa bueno, el papa de las sonrisas. Llega como un hombre muy moderno y muy causal que besa a los niños, que aclama, que dice chistes contra las suegras. Pero yo me quedo solo con una imagen, no veo algo de fondo, creo que ha utilizado muy concientemente una actitud publirrelacionista que va entreteniendo en el tiempo a la opinión publica, pero no ha hecho ninguna declaración verdadera. Las declaraciones que han hecho son ambiguas, confusas y lo que la gente espera del líder espiritual son cosas muy claras".
Encarar los abusos
En diciembre de 2013, el papa Francisco ordenó la creación de una comisión que atendiera los abusos sexuales por parte de sacerdotes, después de que el Comité de Derechos del Niño de la Organización de las Naciones Unidas solicitara a la Santa Sede información sobre las medidas implementadas para castigar a culpables de este delito y declarara que la Iglesia católica había pasado de ser un miembro observador permanente a un “observado”.
Barba considera que estos cambios se han hecho para satisfacer a la opinión pública.
“La Iglesia no ha protegido a los niños y tiene cambios muy recientes que se llevaron a cabo solo porque la presión internacional de la opinión pública fue tan grande que no haber hecho algo habría sido muchísimo peor. Han ido haciendo pequeños toques para demostrar que se está haciendo algo”, dijo en entrevista.
En un informe este año, el Comité de Derechos de los Niños acusó que El Vaticano encubre los crímenes de sacerdotes abusadores de niños con prácticas como traslados de una parroquia a otra. "El Comité está muy preocupado de que la Santa Sede no haya reconocido la amplitud de los crímenes cometidos, no haya tomado las medidas apropiadas para afrontar los casos de pedofilia y para proteger a los niños, y haya adoptado políticas y prácticas que han propiciado la continuación de los abusos y la impunidad de los autores", según el reporte.
El vocero del Vaticano, Federico Lombardi, acusó a la ONU de no tomar en cuenta las respuestas de la Santa Sede sobre el tema, además de considerar que el informe “va más allá de sus competencias“.
En una entrevista publicada en el diario italiano Corriere della Sera el papa dijo: “Las estadísticas sobre el fenómeno de la violencia contra los niños son impresionantes, pero también muestran claramente que la gran mayoría de los abusos se produce en el entorno del hogar y el vecindario. La Iglesia católica es quizás la única institución pública que se ha trasladado a la transparencia y la rendición de cuentas. Nadie más lo ha hecho. Sin embargo, la Iglesia es la única en ser atacada".
El padre José de Jesús Aguilar, subdirector del área de radio y televisión de la Arquidiócesis de México, coincide con esta visión y considera que el papa “continúa con una política de cero tolerancia de que cualquier problema de esta índole sea comunicado inmediatamente al él bajo la jurisdicción del obispo de cada lugar y que se suspenda inmediatamente a cualquier sacerdote que se acuse de esto en tanto no se aclare la situación como tal".
Aguilar agregó que el mejor ejemplo de estas acciones es la reforma hecha en julio de 2013 por el papa Francisco que convierte en crimen el abuso sexual contra niños en terrenos del Vaticano. Antes, el abuso ya era considerado un crimen por la Iglesia, pero con el cambio estas acciones están específicamente prohibidas en el Estado .
En busca de cuentas claras
Una de las acciones más notorias hechas por Francisco es la implementación de políticas para transparentar las finanzas de la Iglesia.
“Hizo una gran renovación en los aspectos financieros. Definió un ministerio de economía y normas muy estrictas contra el lavado de dinero que le permitieron reinsertarse en el contexto financiero internacional”, dijo Masferrer.
Autoridades italianas investigaron al banco del Vaticano en febrero del 2013 , debido a la violación de normas contra el tratado de dinero en operaciones con bancos europeos. La investigación causó el despido del Ettore Gotti Teeschi, director del banco Vaticano. Y desde entonces la Santa Sede adoptó medidas para evitar ser clasificada como un paraíso fiscal.
Tres meses después de convertirse en papa, Francisco designó a una comisión especial para indagar las actividades económicas y jurídicas de la Santa Sede, que durante décadas ha sido sospechosa de lavado de dinero, continuando con el trabajo que inició Benedicto XVI sin mucho éxito .
En febrero de 2014 creó la Secretaría de Economía, un órgano encargado de gestionar las actividades económicas y administrativas de la Santa Sede y este sábado designó a los cardenales que formaran parte de ella, incluido el mexicano Norberto Rivera.
Previamente, Francisco aprobó una reforma del código penal del Vaticano que refuerza las sanciones contra la corrupción y el lavado de dinero, según los parámetros internacionales. Y estableció que las leyes que se aplican al Estado Vaticano se extienden a sus ministerios, organismos e instituciones que dependen de la Santa Sede, así como a organizaciones no lucrativas de la Iglesia.
Aunque los analistas coinciden en que un año es poco tiempo para determinar los cambios y logros de Francisco en la Iglesia, Barba piensa que “una golondrina no hace verano” y que para que se dé una reforma real, el papa “tendrá que limpiar el lastre de siglos que pesa sobre la curia vaticana”.