Activistas pro-Rusia se enfrentan con la policía en Donetsk
Los activistas pro-Rusia y la policía ucraniana se enfrentaron este jueves dentro del complejo de la oficina del fiscal en la ciudad oriental de Donetsk, a medida que las tensiones escalan en violencia.
Como resultado de los enfrentamientos, 26 personas buscaron ayuda médica, cuatro de ellas por heridas con armas de fuego, dijo el departamento de salud de la administración regional de Donetsk. Dos permanecen hospitalizadas.
Al menos un policía fue lesionado en los enfrentamientos, dijo la Secretaria de Asuntos Internos de Ucrania, al añadir que hubo disparos, y que granadas pequeñas y piedras se utilizaron en el ataque.
La policía disparó gas lacrimógeno y granadas de aturdimiento en un esfuerzo por dispersar a los activistas, quienes estaban armados con palos, bastones y escudos pero no parecían portar armas de fuego.
Algunos de los activistas rompieron ventanas y derribaron puertas mientras intentaban entrar al edificio.
“Vamos piso por piso buscando personas… por las personas que estuvieron aquí antes”, dijo uno de los militantes.
Una mujer dijo a un equipo de CNN en tierra que ayudó a un hombre herido que, según dijo, le dispararon dentro del edificio.
Los paramédicos fueron llamados para ayudar a los heridos en el lugar la tarde de este jueves.
Marcha en Donetsk, manifestación en Kiev
Este jueves, las multitudes marcharon en Donetsk, para pedir mayor autonomía para la región del este.
A la cabeza de la marcha, que fue organizada para conmemorar el Primero de Mayo, estaba un orador que acusó a las autoridades en Kiev de llevar a los partidarios prorrusos a pedir un referendo el 11 de mayo y un estado federal.
Muchos en la región ven al gobierno interino en Kiev como una “junta” que tomó el poder gracias al respaldo de grupos ultranacionalistas, y están molestos por sus acciones.
Ucrania del este fue el centro de apoyo para el presidente pro-Moscú, Viktor Yanukovych, derrocado en febrero después de meses de protestas por parte de personas molestas de que diera la espalda a Europa a favor de Moscú.
Los manifestantes pro-Rusia ya controlan varios edificios clave del gobierno en Donetsk, después de apoderarse de ellos el mes pasado, y declararon que ser la “República Popular de Donetsk”.
Desde la Plaza Lenin de la ciudad industrial, donde la marcha comenzó, podían verse hombres enmascarados sobre un edificio junto a una bandera que señalizaba apoyo al campamento pro-Rusia. La bandera ucraniana amarilla y azul, que ondeaba hasta poco tiempo antes, fue arrojada a un lado del edificio, un símbolo de la molestia que se expande.
Los manifestantes pro-Rusia en la ciudad de Luhansk, cerca de la frontera rusa, dijeron este miércoles que incautaron edificios adicionales del gobierno porque querían asegurarse de llevar a cabo el referendo planeado.
La crisis generó divisiones profundas en Ucrania. Muchos también quieren ver al país unido, pero el descontento con la corrupción del gobierno e inefectividad son profundos.
En la capital de Ucrania, Kiev, miles de personas se unieron a una manifestación este jueves para buscar paz y unidad, organizada por grupos estudiantiles, sindicatos y partidos de izquierda y centro.
Los manifestantes pidieron una reforma constitucional, descentralización de poder y nuevas elecciones parlamentarias.
También pidieron un referendo nacional para decidir si Ucrania debe convertirse en un estado federal; si el idioma ruso debe volverse el idioma oficial en algunas regiones; y si Ucrania debe integrarse a la Unión Europea.
El rescate de 17,100 millones de dólares fue aprobado
El presidente interino ucraniano Oleksandr Turchynov reconoció esta semana que el gobierno central efectivamente perdió control de las regiones Donetsk y Luhansk ahora en manos de los separatistas pro-Rusia.
Un referendo controversial en la región del sureste de Ucrania, Crimea, en maro, resultó en su anexión a Rusia, un paso ampliamente condenado por la comunidad internacional.
Al igual que Crimea, aunque no en el mismo nivel, muchos en Ucrania oriental hablan ruso y tienen vínculos culturales cercanos a Rusia.
El gobierno interino, que lucha con una situación económica grave, prometió reformas constitucionales para intentar aliviar las tensiones antes de las elecciones nacionales programadas para el 25 de mayo.
En una señal clave de apoyo internacional, el Fondo Monetario Internacional aprobó un rescate de 17,100 millones de dólares para Ucrania este jueves.
"Obviamente tiene riesgos. Pero es una necesidad responder a la petición de un miembro. E intentamos todo lo que pudimos para mitigar los riesgos de implementación”, dijo la directora del FMI, Christine Lagarde, a Christiane Amanpour de CNN.
Lagarde también señaló que “claramente ha habido consecuencias” para la economía rusa como resultado de su intervención en Ucrania.
"Si ves la política monetaria, si ves los flujos de capital, si ves sus propias predicciones; ha habido consecuencias en la economía rusa como resultado de la situación geopolítica, la incertidumbre y las sanciones que se decidieron”, dijo.
La Unión Europea y Estados Unidos dicen que Moscú hasta ahora no ha actuado en apoyo de un trato internacional del 17 de abril dirigido a aliviar la crisis y esta semana impusieron sanciones adicionales en oficiales y empresas rusas juzgadas de tener cercanía con el presidente Vladimir Putin.
Un diplomático acusado de espionaje
Mientras tanto, Ucrania ordenó la expulsión de un diplomático naval ruso después de supuesto espionaje esta semana, dijo en su página de Facebook la Secretaria de Relaciones Exteriores de Ucrania este jueves.
En el comunicado se dijo que el agregado fue detenido “mientras cometía actividades de espionaje el 30 de abril”.
La secretaria dijo que el diplomático tiene que dejar Ucrania lo más pronto posible.
Orden de reclutamiento militar de Ucrania
Turchynov firmó un decreto para introducir servicio militar obligatorio “para aumentar los poderes defensivos del país”, dijo su oficina en un comunicado este jueves. Los hombres de entre 18 y 25 años serán sujetos a la orden.
El movimiento considera la mayor escalada de la situación en la parte sur y este de Ucrania, así como “casos de agresión abierta” y las acciones de militantes prorrusos, se dijo en el comunicado.
El objetivo es mantener a las fuerzas armadas y ayudarles a “dar una respuesta adecuada a amenazas reales y potenciales a Ucrania”, según el comunicado.
Turchynov dijo este miércoles que las fuerzas armadas del país fueron puestas a disposición de combate debido a la amenaza de Rusia.
Al hablar en una reunión con los directores de administraciones estatales regionales, dijo que la tarea de las autoridades era prevenir la expansión de la “amenaza terrorista” de separatistas y saboteadores pro-Rusia a otras regiones en Ucrania.
Una operación “antiterrorismo” lanzada el mes pasado logró poco o nada.
El gobierno en Kiev dijo que quiere mostrar moderación y parece renuente a embarcarse en operaciones militares en contra de militantes que están en áreas residenciales.
La Secretaria de Relaciones Exteriores de Rusia respondió a los comentarios de Turchynov a finales de este miércoles al denunciar lo que llamó “estos comunicados militaristas de autoridades de Kiev”.
Mientras tanto, militantes en la ciudad de Slavyansk mantienen detenidos a siete observadores militares de la Organización de Seguridad y Cooperación en Europa (OSCE), desde el viernes pasado a pesar de su estatus diplomático.
Denis Pushilin, director autodeclarado de la “República Popular de Donetsk”, dijo que los observadores son espías de la OTAN y que a los activistas les gustaría intercambiarlos por personas detenidas por autoridades pro-Kiev.
El vocero de la OSCE, Michael Bocjurkiw, dijo a CNN este jueves que sus negociadores de nuevo se reunían con separatistas para discutir la liberación del equipo observador occidental. Se dijo que están en buen estado de salud.
Arwa Damon de CNN reportó desde Donetsk y Laura Smith-Spark escribió y reportó en Londres. Andrew Carey, Claudia Rebaza de CNN y la periodista Victoria Butenko en Kiev y la periodista Lena Kashkarova en Donetsk contribuyeron con este reporte. Mick Krever de CNN también contribuyó.