Exclusiva de CNN: Una niña relata cómo escapó del secuestro de Boko Haram
Nota del editor:Nima Elbagir, de CNN, realizó el viaje a Chibok, Nigeria, para recopilar relatos de primera mano de los secuestros de las colegialas, y cómo la gente en la ciudad nororiental siguen viviendo con miedo.
CHIBOK, Nigeria (CNN) — La terrible noticia sobre la llegada de militantes islamistas armados se esparció antes de entrar en el poblado de Chibok el mes pasado. Los habitantes comenzaron a recibir llamadas telefónicas sobre el peligroso acercamiento del grupo extremista Boko Haram.
Nadie sabía lo que el ataque implicaría, que significaría que cientos de colegialas serían arrebatadas de sus camas por un grupo extremista que más tarde amenazó con venderlas.
"Fue como si llegaran en un viaje de compras", dijo a CNN un poblador que presenció el ataque.
Mientras hombres armados se llevaban a niñas de una escuela nigeriana en siete camiones de carga el mes pasado, algunas corrieron hacia la libertad. Una de esas chicas compartió su historia con CNN.
Con el miedo en sus ojos y en su voz, la joven mujer, quien pidió a CNN no dar su nombre, describió la experiencia.
Un hombre la confrontó y le dijo que se metiera a uno de los vehículos. Una vez adentro saltó y corrió. "Preferimos huir que morir", dijo la niña. "Corrimos entre los arbustos. Corrimos y corrimos".
Ella y dos amigas que también lograron escapar vieron algo como fuego y corrieron en esa dirección, pensaron que se trataba de alguna construcción en llamas. Normalmente, Chibok es muy oscuro por la noche.
Las autoridades han dicho que los militantes de Boko Haram secuestraron a 276 niñas de un internado en el pueblo de Chibok, al noreste de Nigeria, el 14 de abril, y que algunas escaparon a la selva. Las chicas, que permanecen desaparecidas, probablemente han sido separadas y llevadas fuera del país, según indican algunos oficiales.
" Secuestré a sus niñas ", dijo el líder de Boko Haram, Abubakar Shekau en un video publicado la semana pasada. "Hay un mercado para vender humanos. Alá dijo que venda, él me manda a vender".
La niña que describió a CNN su escape, aún temblaba por los eventos. Cuando se le pidió describir cómo vestían sus secuestradores, respondió: "siento miedo".
Su escuela esá cerrada, pero si reabriera, ella no regresaría, dice.
Lo que pasó esa noche
Los aldeanos aseguran que difundieron las advertencias a la policía local, que los terroristas estaban en camino esa noche. Les dijeron que habían recibido llamadas telefónicas de familiares y amigos de las aldeas de los alrededores y que había un convoy de camiones de carga, camionetas y motocicletas en camino.
Uno dijo que le alertaron: "Ellos van por ustedes. ¡Corre!".
Los pobaldores contaron que la policía pidió refuerzos, pero ninguno llegó. Todos, incluidos la policía, huyeron a la selva durante el ataque. Pero las niñas estaban durmiendo en sus dormitorios.
Las historias parecen confirmar un informe de Amnistía Internacional de que el gobierno no pudo reunir suficientes tropas contra el ataque y que supo al menos cuatro horas antes del secuestro masivo por parte de Boko Haram.
Un contingente militar de entre 15 y 17 soldados y un puñado de oficiales de policía no pudieron defenderse de cerca de 200 hombres de Boko Haram que sacaron a las niñas de sus camas, apunta el reporte.
El gobierno de Nigeria asegura que respondió con tropas, helicópteros y aviones de manera inmediata tras el secuestro masivo.
Un viaje difícil
Hay muchos puestos de control en las carreteras de la capital de Abuja a Chibok. Algunos de ellas están a cargo de los militares. Otros tienen vigilantes locales, armados con machetes, especialmente colocados en esos lugares.
Las paradas son demasiadas para contarlas y un viaje que debería tardar de ocho a 10 horas, tuvo a la tripulación de CNN por cuatro días de camino.
En cada punto de control, alguien pregunta a dónde nos dirigimos, mete la cabeza en el vehículo y mirar alrededor. A veces, la pregunta es para comprobar los pasaportes.
El pueblo de Chibok es el hogar de cientos de personas, y pese al secuestro, la vida parece ser casi normal. Los niños juegan en las calles; los hombres y las mujeres van a trabajar.
El lugar principal de negocios en la ciudad, el mercado al aire libre, está ocupado, incluso después de caer la noche, aunque no por mucho tiempo. En los pabellones, los aldeanos intentan cargar sus teléfonos móviles a través de las regletas de enchufes conectados a generadores de gasolina. Rara vez el flujo de electricidad pasa a través de la red. Las farolas con energía solar nunca funcionan.
Cuando las mujeres, niños y ancianos van a dormir, los hombres jóvenes se agrupan para revisar todo el pueblo. Cada grupo tiene su propia área de operación en la que los hombres —que trabajan durante el día y tienen muy pocas horas de sueño— hacen patrullas de seguridad toda la noche. Cada uno de ellos lleva un machete, un arco y una flecha envenenada o, en algunos casos, un arma de fuego casera.
Muchos en la aldea dijeron que esperan que esto ayude a poner presión sobre el gobierno para hacer más para encontrar a sus hijas.
Esfuerzos internacionales
El presidente nigeriano Goodluck Jonathan dijo este sábado que estaba preocupado por las niñas y agradeció a otros países, incluyendo Estados Unidos, que han mostrado su apoyo para encontrarlas. "Prometemos al mundo que encontraremos a esas chicas", dijo Jonathan.
Oficiales estadounidenses y británicos están en Abuja para ayudar al gobierno de Nigeria en la búsqueda de la niñas, en el plan de misiones de rescate y aconsejar cómo rendir a Boko Haram. China y Francia también ayudan en la búsqueda.
Al menos 2,000 personas han muerto por la violencia en el norte de Nigeria este año, dijo Amnistía. El más reciente ataque de Boko Haram mató al menos a 310 personas en un pueblo que ha sido usado como base de operaciones para tropas de rescate de las niñas desaparecidas.
El contralmirante de la marina de Estados Unidos, John Kirby, quien sirvió como secretario de prensa del Pentágono, dijo que oficiales creen que las chicas "han sido divididas en pequeños grupos" pero declinó dar detalles de cómo llegaron a esa conclusión. Su opinión ha sido replicada por otros.
"La búsqueda debe ser en Niger, Camerún y Chad, para ver si pueden encontrar información", dijo Gordon Brown, ex primer ministro de Gran Bretaña y enviado especial de la ONU para la educación global.
Pero Jonathan cree que las chicas siguen aún en Nigeria, en algún lado de la selva de Sambisa.
"Si se mueven ese número de niñas a Camerún, la gente lo verá. Así que creo que siguen en Nigeria", dijo.
#BringBackOurGirls
El primer ministro David Cameron prometió este domingo que Gran Bretaña “va a hacer lo que se pueda” para ayudar a encontrar a las chicas.
Sus comentarios los realizó mientras sostenía un cartel con el hashtag #BringBackOurGirls durante el programa Andrew Marr Show de la BBC.
Cameron y el papa Francisco son los últimos partidarios de alto perfil de la campaña en los medios sociales.
El papa tuiteó este sábado: “Unámonos todos en oración por la inmediata liberación de las niñas secuestradas en Nigeria. #BringBackOurGirls”.
Let us all join in prayer for the immediate release of the schoolgirls kidnapped in Nigeria.
#BringBackOurGirls
— Pope Francis (@Pontifex) Mayo 10, 2014
También el sábado, Michelle Obama condenó el secuestro "desmesurado" de las niñas . Durante un discurso semanal en la Casa Blanca, la primera dama de EU dijo que se trataba de la obra de "un grupo terrorista decidido a mantener a estas niñas lejos de recibir una educación”.
Vladimir Duthiers, Isha Sesay, Nana Karikari-apau, Elise Labott, Lindsay Isaac y Chelsea J. Carter contribueron con este reporte.