El gobernante Partido de los Trabajadores de Brasil nominó formalmente el sábado a la presidenta Dilma Rousseff como su candidata para los comicios del 5 de octubre, la mayor prueba para la mandataria desde que llegó al poder en 2002.
La popularidad de
Rousseff
La mandataria aún es la favorita para lograr la reelección en una segunda vuelta, aunque su ventaja se ha reducido en los últimos meses, según las encuestas de opinión.
"Nos enfrentamos a un desafío, ya que la calidad de vida ha mejorado en Brasil y cuando eso sucede en un país su gente demanda más y mejor calidad", dijo Rousseff en un discurso ante una convención de su partido.
El Partido de los Trabajadores tiene previsto hacer campaña sobre la base del mejoramiento en el bienestar social y en la distribución de los ingresos registrado en la última década. Bajo su gobierno, 35 millones de personas han salido de la línea de la pobreza.
El principal rival de Rousseff, Aecio Neves, del centrista Partido de la Social Democracia Brasileña (PSDB), posee un mayor apoyo empresarial y promete recuperar la otrora pujante economía de Brasil.