Estados Unidos está listo para una presidenta, dice Michelle Obama
Michelle Obama dijo el lunes que "definitivamente" no brincará a la política, pero sugirió que Estados Unidos quizás no esté muy lejos de tener a su primer mujer como jefa en comando.
Al preguntarle en un evento en Washington si consideraría una carrera política, una vez que su esposo (Barack Obama) abandone la Casa Blanca en 2017, la señora Obama respondió con un rotundo no.
Pero, aclaró, una mujer presidenta "debería de ocurrir lo antes posible".
"Y creo que este país está listo", añadió.
"La persona que debiera obtener el trabajo, será la persona que esté más calificada. Y tenemos algunas opciones, ¿o no?”, dijo, haciendo más grande la especulación de que Hillary Clinton podría cubrir ese perfil, en caso de que la exsecretaria de Estado de Estados Unidos decida contender.
La señora Obama, que se auto considera "madre en comando", también dijo en una reunión que se enfocó en las políticas para las familias trabajadoras que no le preocupa qué tipo de trabajo obtengan sus hijas, con tal de que les paguen.
Michelle Obama fue cuestionada por Robin Roberts de ABC durante un evento, para que extendiera los comentarios que Barack Obama y ella hicieron en una entrevista reciente, sobre el hecho de que sus hijas Sasha y Malia deberían de experimentar con un trabajo que pague el salario mínimo.
La primera dama dijo que "no importa qué puesto sea".
"Creo que el punto es que aprendan cómo remangarse y trabajar duro y entender lo que la mayoría de las personas en este país tienen que hacer para ganarse la vida, y eso no siempre es glamuroso o divertido todo el tiempo".
Obama recordó los sacrificios de su propia familia para balancear la vida y el trabajo en aras de ayudar a las familias trabajadoras.
En una entrevista para la revista Parade, difundida la semana pasada, la primera dama dijo que trabajó en un taller de encuadernación mientras estaba en la preparatoria y que el presidente comentó que sirvió helados y trabajó como mesero.
Esas experiencias, dijeron el presidente y su esposa, formaron su entendimiento del trabajo duro y es algo que les gustaría que experimentaran sus hijas.
La reunión a la que acudió Michelle se enfocó en las políticas de empleo que ayuden mejor a las familias trabajadoras.