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El capitán del ferry naufragado 'Sewol' es condenado a 36 años de cárcel

Una corte emitió la sentencia contra el jefe del barco que naufragó en Corea del Sur y que provocó la muerte de más de 300 personas
mar 11 noviembre 2014 10:10 AM

Lee Joon-seok, el capitán del ferry que se hundió en Corea del Sur en abril, criticado por haber huido del barco mientras cientos permanecían en el interior, fue sentenciado este martes a 36 años de cárcel.

A pesar de que fue absuelto de asesinato, Lee fue declarado culpable de violar "la ley de los marineros" y abandonar la nave, causado muertes y heridos.

La sentencia fue la culminación de un juicio de cinco meses. Un panel de tres jueces emitió el veredicto y la sentencia para Lee, que fue acusado de múltiples cargos que incluyen negligencia, abandono y asesinato por su conducta en el ferry Sewol que se hundió el 16 de abril.

La fiscalía había pedido la pena de muerte para Lee , alegando que él no utilizó el equipo disponible, tales como balsas salvavidas, chalecos y los avisos para evacuar a los pasajeros.

Apelación probable

Park Gi-ho, jefe de ingenieros del transbordador, fue declarado culpable de asesinato y condenado a 30 años. Los 13 miembros de la tripulación restantes fueron condenados entre 5 y 20 años.

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El veredicto fue recibido con indignación por los familiares de las víctimas, quienes se reunieron fuera de la corte para solicitar una apelación a la sentencia y demandar la pena de muerte para los miembros de la tripulación.

El gobierno de Corea del Sur dijo que los veredictos pueden apelarse.

"Hubo diferencias de opinión en muchos aspectos", dijo el fiscal en jefe, Park Jae-UCK. "Es nuestra posición apelar para que podamos pedir otro juicio".

Tanto la acusación como la defensa tienen siete días para solicitar formalmente una apelación.

La búsqueda finaliza

Más de 300 personas murieron después de que el ferry se hundió en la costa suroeste de Corea del Sur en abril. Casi 250 de ellos eran estudiantes de secundaria que se dirigían a una excursión.

Nueve personas permanecen desaparecidas. El gobierno puso fin a la búsqueda bajo el agua el martes después de buscar durante unos siete meses.

"Las condiciones de la búsqueda ha llegado a situaciones peligrosas, por ejemplo, el colapso de compartimentos en el ferry", dijo Lee Ju-young, el ministro surcoreano de Océanos y Pesca. "A medida que se acerca la temporada de invierno, las condiciones en el mar se están deteriorando”.

Dijo que las posibilidades de hallar a las últimas víctimas fueron disminuyendo y que las condiciones del mar podrían causar bajas.

El ferry será sellado, pero la decisión sobre una operación de salvamento se hará después de considerar varias condiciones y consultar a las familias y expertos.

Tripulación despreciada

Varias fotos mostraron a Lee, vestido con una camisa y en ropa interior, saltando a los brazos de los equipos de rescate, lo que provocaron el rechazo generalizado.

Si bien no hay ninguna ley marítima internacional que diga que un capitán debe hundirse con su barco, sus acciones atrajeron las críticas generalizadas y fijaron en la mente de muchas personas que el capitán había dado prioridad a su seguridad respecto a la de sus pasajeros.

Incluso la presidenta de Corea del Sur, Park Geun-hye, intervino diciendo que las acciones de Lee y su equipo eran "parecidas a un asesinato".

Lee se ha disculpado varias veces, diciendo que sus acciones no fueron intencionales.

"Me quedé petrificado por el accidente y perdí mi capacidad de tomar decisiones. Juro que nunca pensé que los pasajeros deberían ser dejados hasta morir en mi lugar para yo tener seguridad”, dijo.

Lee y otros tres miembros de la tripulación fueron acusados de asesinato en un juicio emocional que comenzó en junio.

Varios de los sobrevivientes testificaron que cuando comenzaron los problemas de la nave, se les instruyó quedarse en lugar en lugar de evacuar. El barco finalmente se volcó, atrapando a cientos de pasajeros en el interior.

La defensa de Lee ha sostenido que el capitán solo había estado al frente de la nave durante seis días y que él no era negligente intencionalmente.

"El acusado llega a entender la responsabilidad y tenía medicación psicológica y pastillas para dormir también", dijo su abogado, Lee Gwang-jae, a la corte a principios de mes. "Él tiene una mentalidad de disculpa y vive cada día como si estuviera caminando sobre un campo espinoso, por la pena de que lo que ha hecho pudiera haberle pasado a su familia".

Lee no había estado comandando en el momento cuando el buque naufragó esa mañana de abril. Lee dijo a la corte que él estaba en su habitación, fumando y cambiándose de ropa cuando los problemas comenzaron en el barco.

Reconoció que él sabía que la persona que estaba al mando no tenía las habilidades adecuadas. "Yo no adopté las medidas necesarias para que los pasajeros salgan del buque", dijo Lee en el tribunal.

"Reflexiono y pido disculpas a las familias de la víctima, a aquellos que perdieron a sus amados hijos e hijas. A los padres yo les diría: ‘he cometido un pecado, digno de muerte’".

¿Un juicio justo?

Ha habido cierta preocupación de que los miembros de la tripulación del Sewol estuvieran siendo satanizados públicamente, lo que afectaría sus posibilidades de un juicio justo. Incluso algunos abogados se negaron a representar a Lee.

Los investigadores han dicho que una gran cantidad de carga, más del doble del límite del ferry, y el fracaso para sujetarla apropiadamente eran en parte responsables de la tragedia del Sewol.

"Me preocupa que los que son más responsables están cambiando la culpa al acusado", dijo el abogado defensor de Lee, cuando comenzó el juicio.

Los operadores de la Cheonghaejin Marine Co., que manejaban el ferry siniestrado, también se enfrentan a un juicio.

La agencia surcoreana de noticias Yonhap informó que los fiscales están buscando una pena de prisión de 15 años por Kim Han-sik, director ejecutivo de la compañía, que se enfrenta a una acusación de homicidio.

El desastre del Sewol causó indignación generalizada en Corea del Sur sobre las normas de seguridad y el fracaso para rescatar a más personas cuando el buque se fue a pique.

Paula Hancocks y Jung-eun Kim contribuyeron con este reporte.

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