El papa Francisco visitó este domingo un barrio pobre en las afueras de Roma, sorprendiendo a sus humildes residentes, muchos de los cuales proceden de países de Sudamérica.
El
"Salió del vehículo y la gente se sorprendió cuando le vieron frente a sus viviendas", dijo el párroco Aristide Sana, que se trasladó a toda prisa al lugar cuando se enteró a último minuto de la parada imprevista del Papa.
Las imágenes televisivas mostraron a
Salieron de sus hogares, hechos de cemento, madera y metal corrugado.
"¿Cuántos de ustedes aquí hablan español?", preguntó bromeando en este idioma.
"¡Todos! ¡Todos!", gritaron.
Sana, cuyos feligreses llevan comida y ropa al poblado, dijo que en la comunidad, compuesta por unas 150 personas, también vive gente procedente de Rusia, Eritrea, Ucrania y Polonia.
El papa, que