Un niño de un año murió de un disparo el domingo, posiblemente a manos de un niño pequeño, luego de que un arma de fuego quedó sin supervisión, indicaron las autoridades de Cleveland.
El jefe de policía local, Calvin Williams, dijo a la afiliada de CNN, WEWS, que había otros dos niños y por lo menos un adulto en el domicilio al momento del disparo.
La información preliminar señala que un niño de tres años jaló el gatillo, apuntó, pero las autoridades siguen investigando.
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"Es un día triste para Cleveland", dijo Williams. "Estamos investigando de dónde salió esta arma. También investigamos cómo ocurrió la tragedia".
La madre del bebé se encontraba en el cuarto con su hijo y otros dos niños (el menor de tres años y otro bebé, de uno), dándoles la espalda, cuando escuchó el disparo, indicó la policía de Cleveland el lunes.
La madre vio al bebé sangrando en el piso y una pistola estaba en el piso, cerca del de tres años, dijo el oficial.
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De acuerdo con el capitán de servicios médicos de emergencia de Cleveland, Michael Threat, el bebé recibió un disparo en el rostro.
"Esta fascinación que tenemos por las armas (no solo en la ciudad, sino en el país) tiene que detenerse. Es una pérdida de vidas sin sentido", indicó el jefe de policía.