Policía mata a uno de los narcotraficantes más buscados en Brasil

El hombre estaba condenado a casi 16 años de cárcel por los delitos de narcotráfico, robo y homicidio
Elementos policiacos hacen vigilancia en una favela de Río d Elementos policiacos hacen vigilancia en una favela de Río de Janeiro

La policía de Río de Janeiro mató este sábado a uno de los narcotraficantes más buscados en esta ciudad con altos índices de violencia y que será sede de los Juegos Olímpicos de 2016.

Celso Pinheiro Pimenta (33 años), conocido como Playboy, murió durante un enfrentamiento con policías, en medio de

en las que actuaron 80 efectivos de fuerzas federales y del estado de Río.

Playboy, que llegó al hospital con vida y murió poco después, estaba en la casa de su novia y escoltado por cuatro hombres, que lograron escapar.

Fue el único herido y por ahora no se conocen otros arrestos.

"Las acciones para detener criminales y decomisar armas continuarán", explicó Antoio Goulart, del departamento de inteligencia de la policía de Río, que ocupará con unos 400 efectivos el complejo de Pedreira.

Condenado a casi 16 años de cárcel por los delitos de narcotráfico, robo y homicidio, Pimenta era un fugitivo de la justicia.

Por informaciones que llevaran a su captura se ofrecía una recompensa de 14,200 dólares (229,496 pesos)

Jefe de la banda que controlaba el narcotráfico en este complejo de favelas en el norte de Rio, Playboy se hizo famoso por unas fotos publicadas en redes sociales en las que aparecía en una piscina pública fuertemente armado con fusiles.

También se le atribuye el robo de 193 motos que estaban en un garage decomisadas por la alcaldía por irregularidades. En ese incidente mujeres y niños fueron usados como escudos.

"Lamento mucho (su muerte), pero muestra que la policía está trabajando", dijo el gobernador de Río de Janeiro, Luiz Fernando Pezao.

Con el Mundial de futbol en 2014, y ahora con

el gobierno de Río viene ocupando desde 2008 centenas de favelas, con el fin de restaurar el orden y arrebatar su control a los narcotraficantes.

La seguridad para los Juegos estará a cargo de 85,000 efectivos, el doble que en Londres 2012.