El empresario guatemalteco Salvador Estuardo González reconoció ser el contable de una mafia aduanera dirigida por el expresidente Otto Pérez Molina, convirtiéndose en el primer acusado que respalda las investigaciones que llevaron a la dimisión y arresto del exmandatario a comienzos del mes.
González aseguró en una audiencia judicial este lunes que
"Fui yo quien identificó como 1 y 2 al presidente y a la vicepresidenta para efectos de distribución del dinero", dijo sobre los pseudónimos que aparecían en las cuentas de la mafia que las autoridades incautaron en varios allanamientos en abril.
"El 50% de los sobornos eran para el 1 y la 2", agregó el acusado, quien fue imputado y enviado a prisión preventiva en junio junto con otros 28 implicados en la red.
La declaración confirmó las pesquisas de la Fiscalía y la Comisión Internacional Contra la Impunidad en Guatemala (CICIG),
El testimonio es un revés para la defensa de Pérez Molina, quien
El arresto del exmandatario, a pocos días de la primera vuelta electoral, coronó una oleada de escándalos de corrupción que impulsó al humorista
La defensa de Pérez Molina trató de frenar el proceso legal por las "débiles evidencias" en su contra, que incluyen vagas referencias a "el 1" o "el dueño de la finca" en la documentación y las llamadas interceptadas, y una sola escucha en la que sale su voz de las casi 80,000 analizadas.
González agregó que la embajada de Estados Unidos estaba al tanto de las irregularidades en las aduanas, en las que también implicó a una exsuperintendente de aduanas y al exsecretario privado de Baldetti, prófugo de la justicia.