Trump elige como embajador de China a un gobernador cercano a Xi Jinping
El presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, seleccionó este miércoles a Terry Branstad, gobernador republicano del estado de Iowa, para ser el próximo embajador estadounidense en China, según confirmó un portavoz oficial.
Branstad "tienen un montón de experiencia es temas comerciales" y un "tremendo conocimiento de China y del pueblo chino", afirmó, en el contacto telefónico diario con los periodistas, uno de los portavoces del equipo de transición, Jason Miller.
Según Miller, Trump quedó "muy impresionado" con el gobernador de Iowa durante la campaña electoral y en reuniones posteriores a su victoria del 8 de noviembre en las urnas y por eso se inclinó para que representara a Estados Unidos ante el gobierno de Beijing.
Branstad tiene amplios lazos con China y una amistad personal con el presidente chino, Xi Jinping, desde hace décadas, por lo que de ser confirmado por el Senado supondría un gesto positivo hacia Pekín después de que Trump hablara por teléfono con la presidenta de Taiwán , Tsai Ing-wen.
El pasado viernes, Tsai telefoneó a Trump para felicitarle por su éxito en las elecciones y ambos mantuvieron una conversación de unos diez minutos, lo que supuso el primer contacto formal de alto nivel entre Estados Unidos y Taiwán en casi 40 años.
China, que es el principal socio comercial de Estados Unidos, considera a la isla de Taiwán una provincia "rebelde" y parte del territorio bajo su soberanía, por lo que el diálogo de Trump originó una protesta formal del gobierno chino ante Washington, al tiempo que generó altas expectativas en Taiwán.
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Trump atacó repetidamente a China en la campaña electoral y en un par de tuits este domingo también arremetió contra sus políticas comerciales y monetarias, así como contra sus reivindicaciones territoriales en el Mar del Sur de China, además de amenazar con imponer aranceles de hasta un 45 por ciento a los productos chinos si Beijing no "se comporta".
Branstad se reunió con Trump en Nueva York el martes y emitió una declaración por escrito diciendo que había disfrutado de una "conversación muy cordial" con el presidente electo y que habían hablado sobre la transición y la próxima Administración.
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El gobernador de Iowa fue uno de los republicanos más activos en apoyar al magnate durante su campaña, y su hijo, Eric, fue quien dirigió la misma en ese estado, uno de los más disputados y en el que el magnate se impuso a su rival demócrata, Hillary Clinton.
