25 años del genocidio de Ruanda, donde murieron 10,000 personas por día
Ruanda comenzó este domingo una semana de conmemoraciones solemnes por las vidas de 800,000 tutsis y hutus asesinados durante el genocidio de hace 25 años.
El presidente ruandés Paul Kagame dio inicio a las ceremonias con una ofrenda floral en el memorial de Gisozi, donde están enterradas unas 250,000 personas. "No hay manera de comprender totalmente la soledad y la rabia de los sobrevivientes y, sin embargo, una y otra vez les hemos pedido que hagan sacrificios para dar a nuestra nación una nueva vida. Las emociones se tienen que guardar", dijo Kagame por televisión a todo el país.
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"Somos mucho mejores ruandeses de lo que éramos, pero podemos ser aún mejores. Somos los últimos en el mundo que deberíamos caer en el conformismo", agregó.
Los 100 días de genocidio comenzaron el 6 de abril de 1994, después de que el presidente Juvenal Habyarimana y su par de Burundi, Cyprien Ntaryamira, ambos hutus, murieran cuando su avión fue derribado sobre la capital ruandesa. Los atacantes nunca fueron identificados.
El ataque movilizó a soldados del gobierno hutu y milicias extremistas aliadas, quienes orquestaron el genocidio para exterminar a la minoría tutsi.
En las aldeas de todo el país, densamente poblado, hombres, mujeres y niños fueron masacrados, quemados vivos, apaleados y fusilados.
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Murieron hasta 10,000 personas por día. El 70% de la población tutsi fue eliminada, y más del 10% de los habitantes de Ruanda.
La lucha terminó en julio de 1994, cuando el Frente Patriótico Ruandés (FPR), un movimiento rebelde tutsi liderado por Kagame, entró desde Uganda y tomó el control del país.
Hoy, la política gubernamental es desalentar enérgicamente cualquier conversación sobre etnias, pero la oposición dice que el control estricto de los medios y la vida política también se usa para reprimir la disidencia.
Kagame, quien obtuvo casi el 99% de los votos en las elecciones de 2017, con una participación del 96%, rechaza las críticas y destaca el fuerte crecimiento económico de Ruanda y la paz relativa desde el genocidio.