"La guerra agresiva desatada por Putin contra Ucrania, y de hecho contra el mundo occidental, no es sólo un crimen contra el pueblo ucraniano, sino también, quizás el más grave crimen contra el pueblo ruso", reza la carta, publicada por el embajador holandés Robert Gabrielse, acompañada del mensaje "¡Valiente!".
"En 20 años de carrera diplomática he visto diferentes etapas de la política exterior, pero nunca había estado tan avergonzado de mi país como desde el 24 de febrero", añadió el texto, aludiendo a la fecha del inicio de la invasión.
UNWatch destaca que Bondarev, quien también había trabajado directamente para el Ministerio de Asuntos Exteriores ruso, es uno de los diplomáticos de más alto rango en "desertar" desde el comienzo del conflicto.
Según el supuesto comunicado de Bondarev, la diplomacia rusa ha empeorado en las últimas décadas con "un creciente nivel de mentiras y falta de profesionalidad", una degradación de la que el ministro de Asuntos Exteriores Serguéi Lavrov "es un claro ejemplo".
"En 18 años ha pasado de ser un intelectual profesional y educado, al que se tenía en gran estima, a ser una persona que constantemente ofrece declaraciones conflictivas y amenaza al mundo, lo que incluye también a Rusia, con el uso de armas nucleares", aseguró.
La dimisión, que según varias fuentes no es la primera de un diplomático ruso por los mismos motivos, debería animar a otros colegas a seguir su ejemplo, dijo el director de UN Watch, Hillel Neuer.
"Estados Unidos, el Reino Unido y la UE deberían liderar el mundo libre y crear un programa para animar a más diplomáticos rusos a desertar, ofreciéndoles protección y seguridad financiera y un lugar donde establecerse para estos diplomáticos y sus familias", añadió.
Con información de AFP y EFE