La elección de Petro: ¿el inicio de una nueva relación Colombia-Venezuela?

El presidente electo y Nicolás Maduro tuvieron una conversación sobre la reapertura de la frontera en común, afectada por cierres desde 2015.
Gustavo Petro marcó distancia con el gobierno de Maduro durante la campaña electoral, llegando a calificarlo de “dictadura".

La izquierda llega al poder en Colombia por primera vez y el presidente electo, Gustavo Petro, ha dicho que restablecerá las relaciones con la Venezuela de Nicolás Maduro luego de tres años de ruptura y graves acusaciones cruzadas entre Caracas y Bogotá.

Este miércoles, Petro y Maduro han tenido su primera conversación sobre el restablecimiento de las relaciones en la frontera entre los dos países.

"Dialogamos sobre la disposición de restablecer la normalidad en las fronteras, diversos temas sobre la Paz y el futuro próspero de ambos pueblos", escribió Maduro en su cuenta Twitter sobre la comunicación con Petro, quien más temprano dijo en la red social que había conversado sobre ese punto.

¿Qué traerá la inminente reactivación de las relaciones bilaterales tras el triunfo electoral de Petro, el domingo, sobre Rodolfo Hernández?

Un periodo tenso en las relaciones Venezuela-Colombia

Las relaciones entre Colombia y Venezuela han tenido altibajos, sobre todo en los últimos 20 años, con la aparición en escena de Hugo Chávez y Álvaro Uribe. Sin embargo, estas vivieron su peor momento bajo el mandato de Iván Duque, con quien Maduro intercambio acusaciones cada vez más graves relacionadas con el narcotráfico y la guerrilla.

La frontera ha sido escenario de múltiples ataques de grupos armados irregulares contra la fuerza pública colombiana y venezolana, y de un atentado con ráfagas de fusil contra un helicóptero en el que viajaba Duque.

El todavía presidente colombiano ha acusado en varias ocaciones a Maduro de dar refugio a guerrilleros colombianos y narcotraficantes en su territorio, lo que Caracas niega, a la vez que acusa a la administración de Duque de enviar paramilitares para desestabilizar y alentar planes de magnicidio en Venezuela.

En febrero de 2019, Venezuela suspendió las relaciones con Colombia como respuesta a la ayuda del gobierno Duque a los esfuerzos de la oposición venezolana para llevar ayuda a la nación afectada por la crisis económica y social.

Gustavo Petro, de guerrillero a presidente de Colombia

Duque calificó de fraude la elección de Maduro en diciembre de 2018 y reconoció al entonces presidente de la Asamblea Nacional, Juan Guaidó, como el gobernante legítimo de Venezuela.

El paso vehicular en la frontera colombo-venezolana está restringido desde 2015. Desde entonces, el uso de las llamadas "trochas", pasos clandestinos en la porosa frontera de más de 2,200 km, proliferó entre los pobladores de ambos países.

El tránsito peatonal y fluvial se reanudó parcialmente a finales de 2021. El paso de vehículos y mercancías sigue cerrado en la ciudad colombiana de Cúcuta, donde se encuentran los principales puentes fronterizos.

Petro: ¿un aliado para Maduro?

Petro, quien asume la presidencia el 7 de agosto, despierta fantasmas entre muchos venezolanos que le asocian con el chavismo, aunque el exguerrillero marcó distancia con el gobierno de Maduro durante la campaña electoral, llegando a calificarlo de “dictadura".

Venezuela felicitó en un comunicado el triunfo del líder izquierdista y expresó "la más firme voluntad de trabajar en la construcción de una renovada etapa de relaciones integrales”.

Restablecer las relaciones con Venezuela fue una de las principales propuestas de la política exterior de Petro durante su campaña presidencial. Además de los problemas en la frontera, los países no tienen consulados ni vuelos directos.

"Las relaciones diplomáticas no pueden depender o centrarse en simples amiguismos ideológicos", dijo a la AFP el historiador Ángel Lombardi, profesor de La Universidad del Zulia (LUZ), región fronteriza con Colombia. "Si se impone la sensatez, van a tener una relación basada en el pragmatismo y el interés común”.

"Nuevos tiempos se avizoran", celebró Maduro en Twitter.

Duque encabezaba en la región la presión diplomática para sacar del poder a Maduro, causa que viene perdiendo adeptos. El resultado electoral del domingo se une al regreso de la izquierda a Argentina y muy probablemente a Brasil en los próximos meses.

La situación deja mal parado a Guaidó, cada vez más debilitado aunque conserva el respaldo de Washington.

Colombia había sido uno de los destinos principales de aliados de Guaidó que se exiliaron por procesos o investigaciones penales en su contra en Venezuela, como su viejo "canciller", Julio Borges.

No obstante, Jesús Esparza Bracho, profesor de Derecho en la Universidad Rafael Urdaneta de Maracaibo (Zulia, oeste), dice que el hecho de que Maduro y Petro sean de izquierda no implica una alianza automática.

"Maduro está más alineado a regímenes menos democráticos y esa no necesariamente es la línea de Petro", comentó el experto, quien piensa que el próximo gobernante colombiano puede ser "catalizador" en el proceso de negociaciones políticas entre Maduro y la oposición, paralizado desde octubre pasado.

"La inestabilidad en Venezuela es una amenaza para Petro, como lo fue por muchos años la inestabilidad colombiana para Venezuela”.

La migración, el tema clave entre Venezuela y Colombia

Migración, seguridad fronteriza y comercio son puntos destacados en la agenda.

El tema migratorio es crucial, cuando miles de personas cruzan a diario la línea limítrofe. Colombia acoge a dos de los seis millones de venezolanos que han migrado por la crisis de su país, a los que Duque ha regularizado para que puedan trabajar y acceder a servicios públicos.

"La población migrante, hoy principalmente venezolana, recibirá un trato digno y respetuoso en los derechos humanos", prometió Petro en su plan de gobierno.

La normalización de relaciones impulsaría por otra parte el intercambio comercial, que rozó los 7,200 millones de dólares en 2008, pero se vino a pique con el cierre de la frontera.

La Cámara Colombo-Venezolana maneja proyecciones de 800 millones a 1,200 millones de dólares en 2022, luego que el año pasado la cifra bordeara los 400 millones.

"Se levanta una nueva cortina", dijo a la AFP Wladimir Tovar, dirigente de la patronal venezolana Fedecamaras en el fronterizo estado Táchira. "Con Colombia siempre hubo una estrecha relación”.

Con información de AFP y EFE