El suministro de agua se interrumpió y dificulta el acceso a agua limpia, un elemento clave en la lucha contra una eventual epidemia de cólera.
Cambio climático, el factor clave
Mientras que los otros factores que habitualmente explican los casos de cólera se mantienen estables, algo que "ha cambiado drásticamente" en los últimos años es el impacto del cambio climático, ha incidido Barboza, en relación a las severas sequías o monzones que han afectado a muchos países.
"Esto ha impulsado realmente el brote más allá de lo que normalmente se ve durante su presencia, y la preocupación es que va a seguir aumentando en los próximos años", ha agregado, para avisar de que se requiere mayor inversión en agua y saneamiento para prevenir casos.
Su colega Abdi Mahamud señaló, por su parte, que “la intersección entre el cambio climático, los conflictos y la situación socioeconómica está haciendo peor la situación”.
Tedros recordó que, aunque el cólera puede matar en cuestión de horas, se puede prevenir con vacunas y con acceso a agua potable y a saneamiento.
Pero con el creciente número de brotes, la oferta de vacunas no puede seguir el ritmo de la demanda, por lo que el doctor Tedros instó a los principales fabricantes de vacunas del mundo a que aumenten la producción.
"Las familias no pueden comprar jabón para lavarse las manos, la basura no se recoge en las calles, los hospitales están cerrados o no pueden funcionar. Todos estos ingredientes han convertido a Haití en una bomba de relojería para el cólera. Ahora ha explotado", dijo Bruno Maes, representante de UNICEF en el país caribeño.
Con información de AFP y EFE