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Panamá elige a su nuevo presidente con una nutrida competencia

José Raúl Mulino, del partido Realizando Metas y delfín del expresidente Ricardo Martinelli, es el favorito para ganar las elecciones en el país centroamericano.
dom 05 mayo 2024 12:07 PM
People vote on the day of the general election, in Panama City, Panama, May 5, 2024.
Los panañemos participan en unas elecciones en las que se van a renovar un total de 885 cargos públicos.

Los panameños acudían el domingo a las urnas para votar en unas elecciones generales donde escogerán al próximo presidente de la nación centroamericana de entre ocho candidatos y a cientos de legisladores y funcionarios locales.

Después de semanas de campaña que incluyeron eventos al son de reggaetón y música artistas populares, más de tres millones de electores decidirán quién está en mejor posición para solucionar los apremiantes problemas económicos, abordar la corrupción y restaurar la reputación del país como paraíso para las inversiones.

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Los colegios electorales abrieron a las 07:00 horas locales (1200 GMT) y muchos ciudadanos se acercaron desde temprano a sufragar en varios centros de votación de Ciudad de Panamá, según pudieron constatar testigos de Reuters. Por el momento no se reportan incidentes.

"Acabo de votar temprano y luego a cuidar el voto (...) Panamá necesita un cambio, es demasiado el retroceso de los últimos cinco años", dijo Amalia Brown, una jubilada de 80 años, en un colegio electoral en Juan Díaz, un vecindario de la periferia de la capital.

¿Quiénes son los candidatos?

De ocho candidatos presidenciales, José Raúl Mulino, del partido Realizando Metas (RM, fundado por el expresidente Martinelli), aventaja en las encuestas por unos 20 puntos a sus tres rivales inmediatos: el expresidente socialdemócrata Martín Torrijos y los abogados de centroderecha Rómulo Roux y Ricardo Lombana.

Les siguen de cerca Ricardo Lombana, que también se postuló anteriormente, y el actual vicepresidente José Gabriel Carrizo.

Abogado derechista de 64 años, de carácter fuerte y cabello cano, Mulino relevó a Martinelli luego de que éste fuera inhabilitado como candidato tras confirmarse una condena en su contra por lavado de dinero.

Entre un enjambre de periodistas, Mulino votó y luego visitó a Martinelli en la embajada de Nicaragua, donde se asiló en febrero ante su inminente captura.

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"¡Hermano!" y "¡Vamos a ganar!", se dicen cuando se abrazan en un salón de la embajada, según un video que publicó Martinelli en la red social X.

A escasos dos días de la votación, la justicia avaló la candidatura de Mulino, que había sido impugnada por no haber pasado por primarias ni tener vicepresidente en la nómina.

¿Por qué cargos se votan?

En el país centroamericano no existe segunda vuelta, por lo que el resultado del domingo será definitivo. No se prevé que ningún partido obtenga la mayoría en la Asamblea Nacional (Congreso), en unas elecciones en las que se van a renovar un total de 885 cargos públicos.

Además de elegir un gobernante para los próximos cinco años en comicios a una sola vuelta, tres millones de los 4.4 millones de panameños están llamados a escoger 71 diputados y los gobiernos locales.

Los diputados de diferentes grupos que respaldaron un controvertido contrato gubernamental con la minera canadiense First Quantum se han enfrentado a una reacción violenta que podría perjudicar sus aspiraciones de reelegirse.

Miles de panameños salieron a las calles el año pasado para protestar por el contrato de la mina Cobre Panamá, que según sus opositores carecía de garantías ambientales y estaba plagado de corrupción. La Corte Suprema dictaminó que el contrato era inconstitucional en noviembre.

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¿Cuáles son los retos para el próximo gobierno de Panamá?

En un país sin partidos de izquierda, los principales candidatos hicieron promesas similares: empleos a granel, dinamismo económico y reformas anticorrupción.

"Panamá tiene que cambiar, hay demasiada corrupción. Estamos cansados", afirmó Jennifer Navarro, maestra de 50 años, en un colegio electoral del suroeste capitalino.

El presidente Laurentino Cortizo, del socialdemócrata Partido Revolucionario Democrático (PRD, mayoritario), sale abucheado por el escandaloso pago de jugosas becas estatales a políticos y sus familiares. El candidato oficialista, José Gabriel Carrizo, figura abajo en las encuestas.

Resulta paradójico que Martinelli, imputado también por espionaje telefónico y sobornos de la constructora brasileña Odebrecht, goce de gran popularidad.

"Será el triunfo de la impunidad", opinó Lina Vega, presidenta de Transparencia Internacional en Panamá, ante la posibilidad de que Mulino, si gana, le otorgue un salvoconducto para que viaje a Nicaragua.

Pero muchos panameños añoran el auge económico del gobierno del multimillonario de 72 años (2009-2014), impulsado por grandes obras de infraestructura.

"Panamá avanzó. Quien no lo acepte es muy sinvengüenza", dijo a la AFP Alberto Cedeño, empleado de la zona libre de Colón, de 41 años.

El próximo gobierno tendrá que lidiar con un sistema de fondos de pensiones en problemas, altos niveles de deuda pública y la pérdida de ingresos por el cierre de la mina, que representaba alrededor del 5% del producto interno bruto.

Aunque la economía creció 7.3% en 2023, este año se desacelerará hasta los 2,5% según el FMI.

Cortizo deja en herencia un déficit fiscal de 7.4%, una deuda pública de 50.000 millones y un sistema de seguridad social colapsado.

"La situación fiscal y económica es muy compleja", opinó el economista Felipe Chapman, para quien el próximo presidente, que lidiaría con un parlamento fragmentado, deberá tomar medidas de ajuste y luego buscar el crecimiento económico con progreso social.

La próxima administración también heredará los problemas que enfrenta el Canal de Panamá, cuyos ingresos cayeron después de que se vio obligado a cortar los cruces de barcos debido a una prolongada sequía.

Y es que en el país con uno de los mayores PIB per cápita de Latinoamérica conviven dos Panamá: el de su capital con rascacielos, lujosos apartamentos y carreteras de avanzada, y el de comunidades sin agua potable, luz, educación, servicios de salud y hasta de recolección de basura.

"Panamá sigue siendo uno de los países más desiguales del mundo", según un reciente informe del Banco Mundial.

Después de que un récord de 520,000 migrantes cruzaron en 2023 la peligrosa jungla que conecta Panamá y Colombia, conocida como el Tapón del Darién, la migración también está en la mente de los votantes. Algunos candidatos han prometido abrir el paso terrestre, lo que podría aumentar el flujo migratorio, mientras otros quieren reforzar los controles o cerrarlo por completo.

Mulino, exministro de Seguridad de Martinelli con fama de autoritario, prometió "cerrar el Darién". Sus adversarios solo que controlarán la situación.

Con información de AFP y Reuters

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