Testimonios de las huellas de violencia en la infancia de Ciudad Juárez
“Quiero tener paz, tranquilidad, quiero salir sin miedo, ir al parque con mis amigos y jugar con mis primos. Quiero salir en paz y tranquilidad por siempre, sin temor de balaceras”. Las palabras son de Karla Belem, de 8 años. Para ella, como para ocho de cada 10 niños de su ciudad, la calle es el lugar más peligroso del mundo.
Karla vive en Ciudad Juárez –frontera con El Paso, Texas-, donde habitan poco más de 250,000 niños y niñas de cero a 8 años. Su testimonio fue recogido por la periodista Marcela Turati durante los años 2009-2010, y es parte del libro Un, dos tres por mí y por todos mis amigos, financiado por la fundación holandesa Bernard van Leer.
Los niños pequeños son casi la quinta parte de la población de esa ciudad fronteriza, y sin embargo, en lo últimos seis años, el gobierno municipal no ha invertido en atención a este sector de la población, asegura Lourdes Almada, secretaria técnica de la Mesa de Infancia del Consejo Ciudadano por el Desarrollo Social.
“Una ciudad no puede ser viable si no invierte en su primera infancia”, afirma Mauricio González Oviedo, consultor de UNESCO y miembro del equipo del Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia, la Educación y la Cultura (UNICEF) que participó hace 5 años en la creación de la Mesa de Infancia, instancia que aglutina a 12 organizaciones.
En Juárez trabajan 6 de cada 10 mujeres en edad reproductiva -la ciudad tiene el récord de participación laboral de mujeres en todo el país-, y al menos una cuarta parte de ellas deja a sus hijos solos entre tres y cuatro horas al día.
En 2005, los juarenses se conmocionaron con la muerte de dos niñas: Airis Estrella, de 7 años, cuyo cuerpo fue encontrado en un bote con cemento, y Anahí, de 10, violada y asesinada por un vecino que simuló un incendio, mientras su madre trabajaba. Ese mismo año, otros seis niños fueron asesinados con violencia, entre ellos un pequeño de dos años, que fue degollado después de que su madre fue violada y apuñalada.
“Hace 5 años estábamos haciendo un plan de acción social para la infancia. Pero esos niños ya nacieron y crecieron y nada cambió, por el contrario, ahora están peor”, dice Mauricio González.
En los próximos días, las organizaciones que integran la Mesa de Infancia iniciarán una campaña por los niños de Juárez y buscarán incidir en las plataformas políticas de los candidatos que la semana pasada iniciaron campañas para la elección de gobernador y alcalde el próximo 4 de julio.
Daniela Pastrana, periodista
